Me costó más trabajo a mí que a ella… y eso me dolía más.

Siempre he sido promotora de la lactancia y ustedes saben perfectamente cómo la he defendido y la he practicado pese a todo. Desde superar críticas, hasta lidiar con viajes largos en donde me la pasaba en el baño extrayendo leche con el objetivo de no perderla… Pero por algo pasan las cosas y uno tiene que fluir.

Cuando nació Lisa, aprender sobre lactancia fue un camino nuevo, a veces uno muy pesado pero en otras ocasiones simplemente me dejé llevar. Leí todo, escribí, pregunté, me informé y puedo decirles que estoy muy orgullosa de mi proceso de lactancia.

Pero la vida continúa y tengo que compartirles que a los 8 meses y medio… llegó el destete. Muchas me criticarán, otras me apoyarán, pero insisto con mi frase: “Cada quien su chichi”.

Les juro que yo le hubiera dado el año completo, pero cuando el destete se da de forma natural no hay nada más que hacer. Y todo comenzó con la introducción de sólidos; obviamente a los 6 meses cuando empezamos esa etapa, Lisa se mostraba entusiasmada ante cada alimento y más por practicar BLW en donde ella misma exploraba la comida, que por seguir con sus tomas.

Todo fue gradual, paso a paso y yo evidentemente estuve apoyándola. De tomar leche a libre demanda – generalmente entre cada 2 o 3 horas- Lisa comenzó a disminuir las tomas. Cada vez que ella quería ahí estaba su mamá, pero si no la pedía, ni modo que la forzara.

Y así fuimos poco a poco, la verdad es que yo tampoco me extraía leche porque mi banco estaba lo suficientemente abastecido y así fue cuando inició el proceso del destete.

Cada vez que pedía leche disfrutaba mucho la toma, me quedaba viéndola, cantándole, acariciándola porque me daba nostalgia de que algún día ya no sucedería.

Punto muy importante, que muchas me han comentado y con gusto se los comparto: El biberón. Es lógico que un bebé que ha sido LME sin introducción de biberón, no lo quiera en el destete… Si nunca lo conoció, siempre va a ser mejor la chichi de mamá que una botella de plástico.

Recuerdo cuando Vane, mi asesora de lactancia, me dijo que si planeaba regresar a trabajar, una vez que estuviera establecida la lactancia introdujera el biberón con mi leche materna en una toma al día para que Lisa se acostumbrara también al biberón. Y así estuve dando pecho y una vez al día bibe -generalmente cuando salía le dejaba la toma a su papá y así también él se involucraba en este proceso.

Aquí los biberones que a mi me funcionaron, probé muchos, pero a mi me funcionaron estos:

Y así mi historia de destete, poco a poco fui produciendo menos leche de forma natural y me tardé mucho en secarme. Recuerda que a mayor succión, mayor producción y como Lisa no se pegaba al pecho como antes, pues no producía tanta.

Pasaron los días hasta que decidí destetarla por completo. Vinieron unos días de muchísimo trabajo y ahí fue cuando tomé la decisión. Me dolió más a mi que a ella. Recuerdo perfectamente ese día, estaba triste porque sentía que estaba fallando como mamá hasta que paré el pensamiento, me auto-felicité por todo lo que había hecho y dejé de pensar en eso. ¡La mente puede ser nuestra peor enemiga!

La ventaja que tuve fue que continuaba dándole de mi leche pero ahora en biberón. Para administrar bien mi banco, opté por una lactancia mixta y nos ha ido de maravilla.

¿Extraño la lactancia? ¡Mucho! Pero ahora disfrutamos juntas otras cosas, como cantarle, leerle un cuento, jugar, gatear por todo el piso y muchas cosas más que día a día suceden.

No se puede criticar la decisión de cada madre. Hay quienes optan por lactancia prolongada, otras tándem, lactancia mixta, LME, fórmula… ¡Lo más importante es que tu bebé crezca sano y fuerte! Ninguna está mal, cada proceso es muy respetable.

Lisa está por cumplir 10 meses, es una niña sana, muuuuuuy despierta, y muuuuy feliz. Nos vuelve locos de amor cada día y disfrutamos mucho cada momento junto a ella.

Espero te haya servido mi historia sobre el destete, si estás pasando por lo mismo espero te identifiques con mi historia. Y cualquier cosa, aquí estoy para ti…

P.D. 1 La próxima semana: Lisa y su primera vez en la playa (ya les tengo algunas  recomendaciones).
P.D. 2 Perdón por no haber escrito antes, ¡no me alcanza el tiempo!
P.D. 3. Ya estoy bajando de peso… ¡Ya les contaré!
P.D. 4. ¿Ya compraron nuestro libro “Mamás Millenial”? El sábado estaremos en Monterrey presentándolo. La cita es a las 12:00pm en Gandhi Hidalgo.