Muchas mujeres informan que necesitan toda la comida y los líquidos mientras amamantan, incluso que sienten más antojos que en el embarazo. Pero, ¿cómo sabes si le estás dando a tu cuerpo lo que necesita? Esto sucede si no bebes suficiente agua mientras amamantas, según los expertos.

“El cuerpo humano es muy bueno. Cuando una persona está lactando, obtendrá una señal para calmar su sed antes que una persona que no amamanta. El cuerpo necesita hidratarse para sentirse bien y para producir leche”, cuenta Leigh Anne O Connor, Consultora Internacional de Lactancia Certificada por la Junta (IBCLC). “El cuerpo priorizará la producción de leche para que la madre tenga sed, antes de que tenga un impacto negativo en la producción de leche. Sin embargo, en algunos casos, el suministro de leche puede verse comprometido si la madre está deshidratada”.

Según el sitio web del Dr. Sears, el promedio de 6 meses consume alrededor de un litro de leche materna al día y el 90% de esa leche es agua, lo que significa que una madre debe beber cuatro vasos extra de 200 ml de líquido al día .

Pero ten cuidado de no forzar los fluidos, señaló Kelly Mom. Beber para “satisfacer la sed es suficiente para que la mayoría de las madres se mantengan hidratadas. Preste atención a las señales de su cuerpo: las madres ocupadas a menudo ignoran la sed si no hay nada cerca para beber, trate de tomar una bebida cerca del lugar donde generalmente amamanta al bebé o en su escritorio en el trabajo”. La orina de color más oscuro, mareos, debilidad, fatiga, dolor de cabeza, orinar poco, estreñimiento, sed y boca seca son señales de que quizá no bebes suficiente agua.

Al igual que Kelly Mom, The Bump señaló que la cantidad de agua que necesitas variará de los requisitos de otras mamás, y también cambiará día a día. “Una forma de saber si estás adecuadamente hidratada: tu pipí. Si tu orina es de color amarillo pálido, estás tomando suficientes líquidos. Si está más oscura, toma líquido extra”.

¿Tienes problemas para mantenerte al tanto de tu consumo de líquidos? Mother Rising ofrece algunos consejos, como llenar vasos de agua o botellas en la mañana, y luego ponerlos en el mostrador (o empacarlos para el trabajo) para que los agarres mientras estás en movimiento.

Amamantar y mantenerte hidratada puede resultar difícil a veces, pero es otro recordatorio de por qué el autocuidado es tan importante para las mamás, especialmente durante los primeros días de la nueva maternidad. Además, estarás lista para recibir alimentaciones nocturnas y múltiples explosiones de pañales cuando lo hagas.