El día de ayer se conmemoró el día internacional de la Mujer, recibí muchos mensajes de felicitación los cuales agradecí, más este día es el día que se conmemora el acceso y ejercicio pleno de las mujeres a todos los derecho, a la igualdad, no discriminación y a una vida libre de violencia y este surge no por fiesta sino por el asesinato de las obreras de una fábrica textil quienes exigían sus derechos laborales mediante una huelga pacífica en Nueva York en el año 1908.
Gracias a todo el movimiento que hace más de 300 años se inició en diferentes países con respecto a la equidad de género y al voto femenino es que hoy gozamos las mujeres de derechos, que nos han permitido incursionar en diferentes ámbitos, pero aún hay mucho por hacer.
Siempre será fácil ver esta diferencia en el género desde afuera, donde la vida ha llevado a las personas a vivir una vida libre de violencia por lo que no la conocen, se requiere tomar conciencia la mujer moderna de esta situación para continuar el legado de nuestras antecesoras, más como no se vive de cerca pierde interés, y juzgar las acciones de las que creemos que hay que seguir se convierten en necedades desde esta perspectiva.
Precisamente el día de ayer una persona me escribió diciéndome que mis escritos perdieron interés porque eran muy feministas y eso ya no era un asunto mediático, a lo que respondí como siempre agradeciendo su comentario y enviándole bendiciones, reconozco que en ese momento me cuestione sobre lo que había escrito, y me puse en el lugar de las mujeres que defendieron con su vida la libertad que ahora gozo y me dije a qué tienes miedo?
Cuando las mujeres nos callamos por miedo al juicio o a la crítica estamos retrocediendo en todo lo que estas maravillosas mujeres hicieron por nuestra libertad, pero hoy nos toca a nosotras seguir luchando por la equidad, más sigue siendo difícil ante las trincheras que la cultura patriarcal sigue poniendo, al igual esta resistencia está basada infundadamente por el miedo.
Hay que recordar que la vida tiene fecha de caducidad, que tenemos que esforzarnos por ser mejor cada día y en esto lleva implícito resguardar el tesoro logrado a base de sacrificios que se llama libertad, libertad de ser, de decidir la vida que queremos vivir sin que alguien supervise nuestras opciones como sucedía en la edad media, situación que aún viven muchas mujeres.
Todo cambio inicia en una persona y tú que lees este artículo no estas exenta de esto, quizá no estés comprometida a causar un impacto en el espacio donde te mueves, más si puedes defender desde tu trinchera las iniciativas de otras mujeres que seguirán luchando cada día por continuar este maravilloso legado de antecesoras que ahora nos benefician a todas y que debemos de salvaguardar porque siguen nuestras hijas y nietas en el camino y pregunto, que deseamos para ellas?
Así que hoy te pido que si no deseas participar activamente en los movimientos en favor de las mujeres en estado de vulnerabilidad no lo hagas, más no permitas que alguien más destruya lo que con la vida han logrado estas mujeres, en lo personal y con la oportunidad que tengo de escribir estas letras para Proyectomamas.tv como en mis redes sociales, al menos hoy me pongo de pie y aplaudo cualquier acción que dignifique, apoye y nutra a las mujeres del mundo, porque todas somos una.
Una mujer que entiende y honra su libertad, apoya a otras mujeres a encontrarla porque en esta acción se expande.