… Y lloré y lloré. Nunca había sentido algo tan mágico y puro. Y ahí entendí a las miles de mujeres que hablan todo el día de sus hijos, de su amor por ellos. Ahí entendí a mi mamá y su amor por nosotros. Ahí entendí a mis amigas que me contaban sobre ese momento y yo revisaba mi celular porque no tenía el más mínimo interés de saber del tema. Ahí entendí a las que suben el Eco en las redes sociales y dicen que es lo más hermoso del mundo… Ahí entendí todo.

Sujeté la mano de Nazareno y le dije a Lisa: “Aquí estamos, listos para recibirte en esta familia.” ¡Qué regalo de la vida! Y eso que aún no la tengo en mis brazos.

¿De qué hablo? De ese momento tan hermoso que vivimos las mamás cuando vemos a nuestro bebé en el famoso Eco. De ese momento en donde el doctor comienza a revisarlo y te dice que está creciendo muy bien, que sus órganos se han desarrollado, que tu bebé se mueve, que tu bebé pesa y mide tanto. Recuerdo llegar nerviosa al Eco, me acariciaba la pancita y le decía a Nazareno que deseaba que Lisa viniera con mucha salud. Creo que es lo único que deseamos las madres, que venga con mucha salud. Recuerdo que antes en mis peticiones al Universo decía: “Quiero un trabajo así, y ganar así, y tener esto y esto otro”. Ahora pido por salud. ¿La vida te cambia no?

Me acosté mientras tenía la mano de Naza entrelazada con la mía y después de haber sentido un gel en mi vientre, comencé a llorar. “Ahí está tu bebé, se está chupando el dedo”. Yo no daba crédito a lo que estaba viendo. Hace unos meses atrás era una semillita chiquita. Ahora sus pies se movían, sus manos también y jugaba con su cordón umbilical. ¿Cómo es posible que nuestro cuerpo sea tan perfecto? ¡Lo veo, y no lo creo! La doctora comenzó a medirla y cada que decía: “Está perfecta” mi sonrisa aumentaba.

En algún momento le pregunté: “¿Doctora, cuando un bebé tiene algún problema de salud, cómo le dices a los papás? pensaba en ellos, en cómo llegaron a esa sala con la ilusión de que sus bebés vinieran sanos y me imaginé el dolor de recibir una noticia que les cambiaría la vida. No para mal, al contrario, mis respetos para todos los padres que día a día se esfuerzan para sacar a sus hijos adelante. Mis respetos para las madres que viven en el hospital luchando por la salud de sus hijos. Mis respetos a esos bebés que se convierten en unos guerreros. De la nada comencé a desear mucha salud para todos.

Sí, el embarazo te sensibiliza, te hace tocar fibras que desconocías dentro de ti. Me ha vuelto más humana… y eso es algo que agradezco todos los días. A eso vine a esta vida, a mejorar como persona, a ser una mujer consciente y sin duda Lisa ha traído eso a mi vida, mi esposo también. ¡GRACIAS VIDA!

Salí del hospital y no daba crédito a lo que había vivido. Me imaginé como sería tenerla en mis brazos y no paré de llorar. No son las hormonas, no puedo justificar mi sentimiento por culpa de las hormonas. Naza me abrazó y disfruté tanto el momento, que juro que Lisa se movió como nunca. Sí hija, te estamos esperando con todo nuestro amor. Ahora las entiendo, perdón a mis amigas por no entenderlas, por decir: “Qué exageradas son”, por ver a una mujer embarazada y no ver que venía caminando un milagro. Le pedí perdón a mi cuerpo porque no tenía ni idea de lo que era capaz de hacer.

Llegué a mi casa y puse el DVD. Compartí la imagen con mis suegros y mis papás, y dije: “Esto lo quiero compartir con todos los que me siguen. Me han seguido en cada bobera que he publicado, también quiero compartirles una imagen de esa personita tan hermosa que se mueve dentro de mí. Y que sé que algún día leerla esto que les comparto: Les presento a Lisa.

“Hija, gracias por provocarme estos sentimientos que desconocía, por moverte dentro de mí. Te espero con ansia en esta familia llena de amor, esta familia que creamos para ti… tu papá y yo”.

Táchenme de sentimental pero ese día todo cambió. No dejo de pensar en su nariz tan hermosa, y esas manitas cubriendo su cara.

PD 1. Gracias a todas las que comparten todo el contenido que hacemos en esta página. Lo creamos con mucho amor.

  1. 2 En mi próximo post les traigo el remedio contra el paño. Fui con el dermatólogo Javier Ruiz y me mandó la lista de cremas que deben usar y que hacer en caso de que haya salido.

PD 3. 13 semanas y ¡llega Lisa!

PD 4 ¿Cuéntame cómo fue cuando viste a tu bebé en el Eco?. ¡Es lo más hermoso!