Los niños pequeños son algunos de los mejores imitadores del mundo, capaces de copiar casi cualquier cosa. Ahora hay un gran enfoque en cómo los padres pueden alentar una alimentación saludable con sus hijos. Ya que tu comportamiento podría ayudar a tus hijos a ser más saludables.

Una alimentación saludable no se trata únicamente de limitar alimentos que consumes y de poner restricciones a la dieta de tu hijo. Por ejemplo, como describe el Chicago Tribune, prohibir cosas como refrescos y alimentos azucarados no es realmente lo mejor para los niños. Como dice Dina Rose en su libro No es sobre el brócoli, muchos padres “se concentran demasiado en los nutrientes o la cantidad de azúcar que sus hijos consumen diariamente, en lugar de mirar a la idea de enseñarles a sus hijos a comer variado y con moderación”, según el Chicago Tribune.

Esencialmente, restringir los alimentos no les enseña a tus hijos cómo tener una relación saludable, no solo con los dulces, sino con los alimentos en general. En cambio, la comida se convierte en un campo de batalla y en un aspecto de la vida del que no tienen control.

Un nuevo estudio de Penn State, ha examinado la relación entre el comportamiento de los padres y los hábitos alimenticios de sus hijos. Una gran parte de la alimentación saludable es saber cuándo ya fue suficiente o la capacidad de autorregularte.

La autorregulación se puede entender en dos partes básicas, como lo señala Psychology Today. En primer lugar, desde un punto de vista del comportamiento, se refiere a la capacidad de alguien para actuar a su mejor interés a largo plazo, de acuerdo con sus valores más profundos. Emocionalmente, se refiere a la capacidad de alguien para calmarse cuando está enojado y animarse cuando está molesto. La autorregulación es una habilidad.

Para este estudio reciente, según Science Daily, investigadores descubrieron que los niños pequeños con poca capacidad de autorregulación pasaban a tener un IMC más bajo en edad preescolar si sus madres jugaban con ellos y los alentaban. (IMC significa índice de masa corporal y es una manera de comenzar a determinar qué peso es saludable para un individuo).

Cynthia Stifter, profesora de desarrollo humano en Penn State, explicó, según Science Daily:

“Si los padres pueden ayudar a su hijo a autorregularse, ese niño puede usar esas habilidades en muchas otras situaciones, incluida la alimentación. Una buena autorregulación puede ayudar a un niño a evitar berrinches, pero también puede evitar que coma demasiado. Desarrollar esas habilidades es un proceso que no se desarrollará por sí solo, por eso lo padres deben ayudar”.

Esencialmente, jugar con los niños y animarlos a que limpien de forma “gentil” los ayuda a aprender a regularse. Stifter recalcó a Science Daily:

“Es comprensible que los padres no siempre sean positivos y amables… Pero en situaciones en las que pueden, este estudio implica que esta forma de crianza le enseñará al niño una habilidad que puede aplicar en muchas situaciones, incluido el arte de comer”.

Este estudio muestra una buena manera en que los padres pueden comenzar a sentar las bases para esas buenas relaciones alimentarias.