La historia de este bebé ha recorrido el mundo entero debido a que se ha convertido en un verdadero guerrero. Ni siquiera ha cumplido su primer año, sobrevive a una rara enfermedad y además da positivo a COVID-19.

Su nombre es Kasen Donerlson lo han apodado como el “bebé milagro” en Estados Unidos ya que sobrevivó al contagio de coronavirus y a un delicado trasplante de hígado, esto al ser diagnosticado atresia biliar previamente presentó ictericia y problemas resporatorios.

Al menor se le detectó la enfermedad debido al tono de su piel que se tornó amarillenta además de la acumulación de bilirrubina en la sangre. La permanencia del menor iba a ser breve sin embargo, tras dos meses se le diagnostico la rara enfermedad que obstruye los conductos del hígado que transportan la bilis.

“Tuvimos un sinfín de visitas al hospital y estuvimos allí durante cinco, siete o 10 días debido a la gravedad de la enfermedad y las complicaciones que tenía Kasen (…) Tenía fiebres que no bajaban”, explicó Mitayah Donerlson, la madre del pequeño a Good Morning America.

Desafortunadamente mientras la madre del menor hacía gestiones necesarias para la operación de Kasen, ella, su pareja, su sobrina de 5 años dieron positivos a COVID-19.

“El 21 de noviembre se despertó esa mañana y tenía mucho calor. Su cuerpo era como tocar una estufa. Solo lloré porque sabía que el hospital nos iba a admitir, pero no sabía que nos iban a decir que tenía COVID positivo”, explicó al programa.

El menor fue hospitalizado por tres días, ahí presentó fiebre, aunque su familia no tuvo complicaciones, dos semanas después la mujer fue notificada para la operación ya que había un hígado disponible.

“Todo lo que pude hacer fue llorar. Eran lágrimas de mamá y lágrimas de alegría. Estaba tan feliz. Siempre supe que iba a recibir un trasplante, esa era mi fe, pero finalmente recibir esa llamada y ese mensaje de que la cirugía estaba programada y que el alivio de la carga sobre mis hombros desapareciera, me sentí tan bueno”, expresó Mitayah Donerlson.

Finalmente Kasen fue intervenido al trasplante a principios de enero pesando solamente cuatro kilos más desde que nació. El hígado que recibió fue de un adulto joven que murió, los médicos usaron la parte izquierda del órgano, tamaño perfecto para el menor.

Así luce a quince días de haber recibido el trasplante de hígado. ¡Guerrero!