Los biberones se han convertido en nuestros mejores amigos, sin embargo, recientemente un estudio confirmó que nuestros bebés, suelen ingerir millones de microplásticos al día.

La investigación que fue publicada por Natura Food, confirma que los bebés que son alimentados con mamila ingieren este tipo de microplásticos al día.

Aparentemente el proceso para esterilizar los biberones también provoca que se desprendan millones de microplásticos y billones de nanoplásticos, los cuales son aún más pequeños. De acuerdo a las investigaciones, los biberones pueden liberar más de 16 millones de microplásticos por litro.

Foto: Public Domain Pictures

El material más utilizado para crear biberones es el polipropileno, el cual fue utilizado para estas pruebas que arrojaron estos resultados. Con esto, llegaron a la conclusión sobre el riesgo que hay cuando preparamos alimentos en plástico, lo cual aparentemente produce una mayor exposición.

“Un estudio realizado el año pasado por la Organización Mundial de la Salud estimó que los adultos consumirían entre 300 y 600 microplásticos al día; nuestros valores promedio eran del orden de un millón o millones”, declaró el profesor John Boland, de Trinity College de Dublín, quien junto con su equipo quedaron impactados por la cantidad de MP que producen los biberones.

Recomendaciones para eliminar la máxima cantidad de microplásticos:

  • En caso de esterilizar la botella, debemos preparar agua esterilizada, esto se logra hirviendo el líquido en una olla de vidrio o acero inoxidable y así enjuagar la botella esterilizada.
  • Para preparar la fórmula, debemos hacerlo en un recipiente aparte, en una olla que no sea de plástico, utilizando al menos 70º C de agua.
  • Debemos dejar enfriar a temperatura ambiente y posteriormente vaciarla en el biberón que ya tuvo que haber sido enjuagado.
  • No debes recalentar la leche en el biberón, ya que podría desprender aún más los microplásticos.
  • No agitar mucho el biberón.
  • No utilizar el horno de microondas para recalentar la leche.

Estas recomendaciones podrían evitar que nuestros hijos continúen consumiendo todo tipo de partículas de plástico que a la larga producen un daño en su organismo.