El ritmo de la vida actual muchas veces no nos permite relajarnos, incluso durante el embarazo podemos llegar a tener un poco de estrés, sin embargo, si se vuelve constante, los efectos en nuestra salud y en nuestro bebé pueden llegar a ser duraderos.

Incluso puede poner en riesgo el bienestar del bebé debido a los niveles de cortisol, que se libera cuando estás estresada, ya que tu cuerpo entra en estado de ‘lucha o huida’.

Los científicos de la Universidad de Granada ( UGR) demostraron que los niveles de cortisol en la madre en el primer trimestre del embarazo no permite que se libere la misma hormona en el recién nacido, lo cual puede repercutir en su salud.

El cortisol liberado en el recién nacido tiene como función que se maduren sus pulmones, por ello si sus niveles son bajos, aumenta la posibilidad de que requiera la administración de glucorticoides que impide problemas en el desarrollo de sus pulmones.

El estudio se realizó a 80 mujeres embarazadas durante todo su embarazo, con distintas medidas psicológicas y de cortisol en pelo. Se comprobó cómo repercuten en los niveles de estrés tanto el psicológico como el fisiológico, en los niveles del pelo de los recién nacidos. La hormona se deposita en la raíz capilar por el paso de los meses, por lo que al cortar un mechón se obtuvo la información de los tres centímetros de los niveles de estrés.

Por su parte el autor principal del estudio, Borja Romero González, investigador del departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la UGR, explicó que “tal es la importancia del estrés en el embarazo que ha surgido el término ‘estrés específico del embarazo’ para definir aquellos pensamientos y preocupaciones que tiene una madre sobre todo lo que rodea a su embarazo”,

El estudio pertenece al proyecto de investigación denominado GESTASTRESS, en el marco de Proyectos I+ D de Excelencia concedidos por el Ministerio de Economía y Competitividad, además ha sido publicado por la revista PLoS ONE.

La conclusión es que si la madre vive con constante estrés o estrés psicológico en el primer trimestre, sus niveles de cortisol serán altos, lo que será capaz de predecir niveles de la hormona muy bajos en el bebé a la hora de su nacimiento, el organismo del recién nacido se encontrará alterado y le impidirá generarlos por sí mismo.

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