Probablemente hayas visto fotos desgarradoras de osos polares hambrientos que advierten sobre el impacto del cambio climático, pero los animales no son los únicos que ponemos en riesgo cuando no hacemos esfuerzos para frenar el cambio climático provocado por el hombre. Los expertos ahora dicen que los niños enfrentarán la mayor parte de los riesgos de salud relacionados con el cambio climático, desde enfermedades contagiosas hasta desastres naturales. Pero no todo son malas noticias, ya que hay mucho que podemos hacer para combatir los cambios.

Un artículo reciente publicado en la revista Pediatrics informó que los niños tendrán el 88% de la carga de salud asociada con el cambio climático, informó CNN. Estos riesgos para los niños incluyen principalmente un mayor riesgo de enfermedades infecciosas y frecuentes desastres naturales. El Dr. Kevin Chan, presidente de pediatría en Memorial University, jefe de salud infantil en Eastern Health en Canadá, y coautor del artículo dijo a CNN que “ya hemos visto los impactos”, señalando a huracanes importantes como Harvey e Irma, así como las olas de calor y el brote de nuevas enfermedades infecciosas como el virus Zika, como ejemplos de nuevos riesgos.

Otra preocupación importante citada en el documento es la prevalencia de muertes por diarrea, malaria y deficiencias nutricionales, todo lo cual Chan y su coautora Dra. Rebecca Pass Philipsborn, miembra de la facultad de pediatría de la Facultad de Medicina de la Universidad de Emory, sugirieron puede ser influenciado por el cambio climático. La diarrea y la malaria son más prevalentes en temperaturas más cálidas y la Organización Mundial de la Salud pronostica que para el año 2030 habrá 48,000 muertes adicionales por enfermedades diarreicas en menores de 15 años.

Además del riesgo de enfermedad, se espera que los cambios extremos de temperatura y la sequía provoquen la pérdida de cosechas, lo que resultará en una proyección de 95,000 muertes infantiles adicionales debido a la desnutrición para 2030, según la OMS. Chan y Philipsborn también explicaron que los niños son más vulnerables al calor, sequía y contaminación del aire.

Pero los médicos no son los únicos que deben tomar medidas. Además de detallar los riesgos potenciales, Chan también pidió preparaciones en tiempo real para los próximos cambios. Si bien es necesario un cambio a gran escala, las personas no son indefensas. Forbes enumera una serie de formas en que puedes hacer tu parte. Convertirte en vegetariano o vegano, comprar comida local y reciclar regularmente son solo algunos ejemplos de cómo puedes ayudar a reducir tu huella de carbono. Pequeños cambios hacen una gran diferencia.

Además, los adultos no son los únicos que tienen un papel que desempeñar en la lucha contra el cambio climático. Aunque no deseas asustar a tu hijo, tomarte el tiempo para hablar con él sobre el cambio climático y las formas en que los afectará es un primer paso importante. National Geographic sugiere que los padres comiencen inculcando el respeto por el planeta en sus hijos hablando de ecosistemas y mirando fotos de belleza natural. Otros consejos incluyen involucrar a los niños en el reciclaje en el hogar, así como enseñarles dónde van sus desechos.

Los impactos del cambio climático pueden ser aterradores, especialmente cuando se trata de la salud de tus hijos. Pero en lugar de congelarse con miedo, los padres deberían seguir la recomendación de Chan y consolarse al saber lo que ellos y sus hijos pueden hacer para hacer del mundo un lugar mejor para las generaciones futuras.