Nuevos datos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades informan que el autismo puede ser más común en los niños de lo que pensamos, incluso más común de lo que los investigadores creían incluso hace unos años. El informe de los CDC dice que aproximadamente 1 de cada 59 niños en los Estados Unidos vive con trastorno del espectro autista. El número anterior, lanzado en 2016, era 1 en 68 niños. Pero los expertos no están seguros de si los números realmente aumentan, o si las personas han mejorado para identificar el autismo infantil.

El informe, ofrece estimaciones de la prevalencia y características del trastorno del espectro autista en más de 300,000 niños de 8 años, y se considera un aspecto “detallado” que también puede darles a los investigadores una idea de cómo el trastorno del espectro autista puede estar en aumento en general.

La última estimación representa un aumento del 15% en la prevalencia de autismo desde hace dos años, y un aumento del 150% desde 2000, según CNN. Los expertos aún no pueden estar seguros de si el aumento es realmente gracias a las mejoras en la forma en que reconocemos y diagnosticamos el trastorno del espectro autista, lo que sería una señal muy positiva.

El aumento en las cifras se debe en parte a un aumento en los diagnósticos entre los niños afroamericanos e hispanos, de acuerdo con USA Today. En el informe de 2012, los niños blancos fueron diagnosticados un 50% más a menudo que los hispanos, informó la publicación. También se les diagnosticó un 20% más que los niños afroamericanos. Este último informe muestra que esa brecha se ha reducido al 20% entre los hispanos y al 10% entre los niños negros. Realmente son buenas noticias cuando se trata de entender el trastorno del espectro autista, y cuando se trata de abogar por la inclusión y la aceptación de toda la comunidad autista.

Las reacciones a los nuevos datos fueron rápidas, y Autistic Self Advocacy Network (ASAN), una organización que “busca avanzar en los principios del movimiento de derechos de las personas con discapacidad con respecto al autismo”, reaccionó diciendo que, si bien son buenas noticias cuando se trata de reconocimiento y apoyo, todavía hay mucho por hacer para fomentar la aceptación.

En una declaración, ASAN escribió sobre las disparidades raciales en el diagnóstico del trastorno del espectro autista en particular. La declaración decía en parte:

“Los resultados indican que un mejor reconocimiento del autismo y una reducción alentadora de las disparidades raciales y de género en el diagnóstico han provocado que las tasas de diagnóstico aumenten ligeramente en las comunidades encuestadas. Hay más trabajo por hacer para abordar las disparidades de diagnóstico que persisten y para garantizar que las personas autistas en todas las comunidades reciban los apoyos que necesitamos”.

La declaración continuaba: “Las mujeres y niñas autistas también permanecen sorprendentemente infradiagnosticadas, dejando a muchas personas sin los servicios y apoyos necesarios. Debemos seguir trabajando para garantizar el acceso equitativo a un diagnóstico culturalmente y competente en materia de género”.

Al identificar el trastorno del espectro autista en más niños a una edad más temprana, es más probable que ellos reciban adaptaciones en todas las áreas y sean más capaces de abogar por sí mismos a lo largo de sus vidas. A medida que aumentan las cifras en lo que respecta a qué tan “común” es el autismo, recuerda que eso quizá significa que la comprensión y aceptación también aumentan y eso es algo bueno.