Hay una enorme diferencia entre causalidad y correlación. El estudio más citado cuando los bloggers y gente de Facebook tratan de alejarte de Tylenol infantil (acetaminofeno o paracetamol), proclamando que causa autismo (ASD), fue un pequeño estudio de grupo de 19 publicado en Autism Open Access. No fue un estudio concluyente. Mostró una posible correlación entre los niños que recibieron primero paracetamol y luego ibuprofeno para reducir las fiebres de bebés.

Mostró un marcado aumento en los casos de autismo dentro de ese pequeño grupo altamente controlado. Lo inusual de este estudio es que no se diseñó necesariamente como una investigación sobre Tylenol infantil posiblemente responsable del autismo. En lugar de eso, estaba buscando si algo llamado “estimulación endocannabinoide”, un efecto de la administración de Tylenol, podría usarse como un posible tratamiento para el autismo.

Pero hay otros estudios. El investigador jefe del estudio endocannabinoide había publicado previamente un estudio similar que relaciona el paracetamol y el autismo cuando el medicamento se administró después de una vacuna. De nuevo, fue un estudio de encuesta y con un pequeño número de pacientes evaluados.

Lo que no te dicen es que estos estudios solo señalan a niños que estaban febriles en algún momento que necesitaban acetaminofeno. Los niños que no recibieron el medicamento o que presentaron autismo o no se excluyeron de la encuesta. No evaluaron si el Tylenol infantil causa autismo en niños que lo tomaron más tarde o que no estaban febriles.

Por lo tanto, lo que estas encuestas pueden mostrar es que algo que le sucede a los niños que tienen fiebres recurrentes y los niños que con frecuencia estaban enfermos pueden ser más propensos a desarrollar autismo. Incluso eso es un tramo considerando el pequeño grupo de muestra. Sin embargo, hay poco de investigación sólida en esta área.

Otro estudio, publicado en Frontiers in Physiology, encontró algo interesante. Los investigadores sugieren que el autismo no es solo un trastorno del cerebro, sino un trastorno sistémico y que las personas que lo padecen tienen mayores niveles de estrés oxidativo y eso aumenta la inflamación.

Estos niveles de estrés oxidativo e inflamación podrían aumentar la necesidad de acetaminofeno, señaló el Journal of International Medical Research. El estudio no descartó la exposición al paracetamol como un posible desencadenante, pero tampoco quitó esa conclusión, sino que solicitó más análisis. Pero es importante tener en cuenta que la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP), la Asociación Estadounidense de Médicos de Familia (AAFP) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) recomienda paracetamol para la fiebre y dolor en bebés.

El Dr. Barry Solomon de la Universidad Johns Hopkins señala: “El acetaminofeno y el ibuprofeno siguen siendo los medicamentos recomendados para el tratamiento de la fiebre en bebés y niños. Pero es muy importante que los padres comprendan cómo medir y dar la dosis correcta en función de la edad y el peso”.

Habla con el pediatra y determina qué hacer en caso de fiebre o dolor y cómo vas a tratarlo. Nadie sabe qué causa el autismo, pero lo mejor que podemos esperar es más investigación. Por lo tanto, tendrás que seguir tus instintos y el consejo de profesionales médicos de confianza.