Es difícil entender el hecho de que la mortalidad materna sigue siendo un problema tan frecuente en todo el mundo. Pero desafortunadamente, todavía hay mucha investigación por hacer sobre el tema y cómo prevenirlo. Un nuevo estudio publicado en la revista médica británica The Lancet Global Health, encontró que las mujeres embarazadas con anemia enfrentan un mayor riesgo de muerte materna. Eso es frustrante y bastante inaceptable cuando se tiene en cuenta el hecho de que la anemia es totalmente prevenible, según informa CNN.

Existen algunos tipos diferentes de este padecimiento y significa que tu cuerpo tiene una “cantidad de glóbulos rojos inferior a la normal”, según el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre. Los glóbulos rojos son los que empujan el oxígeno de sus pulmones al resto de tu cuerpo. Puede hacer que te sientas cansada, débil y causar dolores de cabeza, dificultad para respirar, mareos e incluso latidos cardíacos irregulares.

La anemia leve es muy común, y solo significa que no recibes suficiente hierro y otras vitaminas, que generalmente es lo que los médicos recetan a las personas que presentan síntomas. (Sin embargo, también existen otras afecciones más graves que pueden causar niveles más bajos de glóbulos rojos, como enfermedad renal, cáncer o enfermedades autoinmunes).

Las mujeres en sus períodos o están embarazadas tienen un mayor riesgo de anemia leve, por lo que es tan importante que consulten a su médico y tomen vitaminas prenatales para prevenirla.

Según la Organización Mundial de la Salud, los médicos e investigadores también han supuesto que podría haber un vínculo entre ésta y la mortalidad materna, pero los datos nunca han sido definitivos. Este estudio, sin embargo, parece haber encontrado un vínculo sólido entre la condición y la muerte materna.

El estudio se basó en datos de la Organización Mundial de la Salud de 29 países de América Latina, África, el Pacífico occidental, el Mediterráneo oriental y el sudeste asiático. Examinaron 312,281 embarazos en los que se identificaron 4,189 casos de anemia y de esos casos, hubo 341 muertes de mujeres anémicas. Hubo 341 muertes en esos casos anémicos, y las mujeres de bajos ingresos en los países en desarrollo incluidos en el estudio fueron mucho más vulnerables. Pero eso no significa que la mortalidad materna no ocurra en todas partes del mundo.

La OMS informa que el 99% de todas las muertes maternas ocurren en países en desarrollo. Jahnavi Daru, autora principal del estudio y becaria de investigación doctoral de la Universidad Queen Mary de Londres, dijo en un comunicado a Medical Xpress:

“La anemia en el embarazo es uno de los problemas médicos más comunes que enfrentan las mujeres embarazadas tanto en países de bajos como altos ingresos. Hemos demostrado que si una mujer desarrolla anemia severa en cualquier momento de su embarazo o en los siete días posteriores al parto, corre un mayor riesgo de morir, lo que hace que el tratamiento urgente sea aún más importante. La anemia es una afección fácilmente tratable, pero los enfoques existentes hasta ahora no han podido abordar el problema”.

Daru le dijo a CNN que no es un problema que pueda resolverse simplemente dando suplementos de hierro a las mujeres embarazadas. Ella dijo: “A menudo pensamos que dar tabletas de hierro  lo resolverá. El suministro de tabletas de hierro ha estado sucediendo durante 50 años, pero esto sigue siendo un problema”.

Este estudio muestra un fuerte vínculo entre la anemia y la mortalidad materna, lo que significa que hay una razón más para exigir que legisladores y funcionarios de salud hagan algo al respecto.