El trastorno del espectro autista crece cada vez más en el mundo, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Las preguntas sobre qué lo causa y por qué los diagnósticos han aumentado en los últimos años han sido objeto de acalorados debates en la comunidad médica, y entre los padres preocupados por el riesgo de sus hijos. Sin embargo, una nueva investigación publicada esta semana sugiere que las madres pueden ayudar a prevenir el autismo. Los investigadores descubrieron que la deficiencia vitamínica durante el embarazo podría afectar el riesgo de autismo y tomar vitamina prenatales diarias con ácido fólico ofrece beneficios significativos.

Para el estudio, los investigadores siguieron a 45,300 niños israelíes desde el nacimiento hasta el 26 de enero de 2015, según ABC News. El equipo estudió los datos de la encuesta sobre las madres que quedaron embarazadas entre el 1 de enero de 2003 y el 31 de diciembre de 2007, incluso si sus médicos le recetaron suplementos multivitamínicos o de ácido fólico a mujeres. El estudio determinó que los niños nacidos de mujeres que recibieron multivitaminas o ácido fólico mostraron un riesgo 73% menor de un diagnóstico de autismo que los niños cuyas madres no tomaron un suplemento.

Los hallazgos del estudio fueron publicados la semana pasada en el Journal of the American Medical Association Psychiatry.

Si bien los nuevos hallazgos fueron consistentes con los resultados de un estudio anterior sobre autismo y consumo de vitaminas en madres suecas, el estudio israelí ofreció nueva evidencia sobre los beneficios de suplementar mucho antes de la concepción.

Los investigadores encontraron que las madres que tomaron vitaminas prenatales hasta dos años antes del embarazo también vieron un riesgo mucho menor de que sus hijos desarrollaran autismo, según el informe de JAMA. Pero aunque el equipo solicitó más estudios sobre la posible conexión entre la deficiencia vitamínica y el autismo, especialmente considerando la pequeña muestra de niños con autismo en su población de investigación, los hallazgos parecen ofrecer aún más razones para que las mujeres tomen un prenatal diario, incluso si no están planeando un embarazo.

Los médicos recomiendan desde hace mucho tiempo que todas las mujeres que busquen quedar embarazadas tomen una vitamina prenatal diaria como forma de protegerse contra posibles defectos de nacimiento. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la investigación ha relacionado la falta de suficiente ácido fólico, por ejemplo, con un mayor riesgo de defectos del tubo neural como la espina bífida.

En este momento, el consenso general es que no existe una causa singular de autismo, sino más bien múltiples factores causales, sin embargo, estos hallazgos reflejan una asociación positiva con la preconcepción materna y la ingesta prenatal de ácido fólico/vitaminas prenatales y un riesgo reducido de tener un bebé con autismo. Si bien falta demostrar la causalidad biológica para reforzar de manera definitiva este vínculo, estos hallazgos sirven como un recordatorio de la importancia de la nutrición prenatal y prenatal.

Y aunque la idea de que la dieta podría desempeñar un papel no es nueva, los investigadores externos advirtieron contra los padres (o quienes buscan convertirse en padres) tomando un prenatal exclusivamente para la prevención del autismo. En una entrevista con el Chicago Tribune en el estudio sueco, la investigadora principal Elizabeth DeVilbiss dijo que los estudios sobre el vínculo entre el consumo de vitaminas y el riesgo de autismo deberían considerarse como un tema de conversación importante entre las mujeres y sus médicos.