Si estás embarazada y si necesitas ser o elegiste ser inducida, podrías preguntarte qué esperar. Según expertos, tu partera o gineco-obstetra podría elegir utilizar uno o más de los diferentes tipos de inducción dependiendo de varios factores, incluyendo qué tan avanzada estás, si tu cuello uterino está listo o no o si estás dilatada. tu salud y la de tu bebé, y la posición de tu bebé.

De acuerdo con el Congreso Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos (ACOG), existen cinco métodos principales de inducción que se pueden usar. Según la American Pregnancy Association (APA), se pueden usar medicamentos para comenzar el trabajo de parto, incluidas las prostaglandinas (medicamentos utilizados para “madurar” el cuello uterino) o la Pitocina (una forma sintética de la hormona oxitocina que induce contracciones uterinas).

De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), la inducción de parto creció mucho. Casi el 24% de los partos vaginales son el resultado de alguna forma de inducción. Según la Clínica Mayo, algunas razones médicas para inducir incluyen tener un problema de salud (como presión arterial alta, diabetes gestacional o infección uterina), ir más allá de la fecha de parto, entre otras. Al final, tus médicos y tú podrán evaluar tu embarazo, tu salud, la de tu bebé y determinar qué es lo mejor.

Estos son los tipos de inducción:

Pelar membranas.
Según ACOG, si tu cuello uterino ya está un poco dilatado, “pelar” o “barrer” tus membranas podría ser suficiente para comenzar tu trabajo de parto. Para realizar el procedimiento, tu médio colocará un dedo enguantado dentro del cuello uterino y usará un movimiento de barrido para separar el saco amniótico de tu bebé del costado del útero. Esto puede hacer que tu cuerpo libere prostaglandinas u hormonas que pueden adelgazar y dilatar el cuello uterino o causar contracciones.

Ruptura artificial de membranas.
Según ACOG, romper el saco amniótico de tu bebé o tu fuente con un pequeño anzuelo durante un procedimiento llamado amniotomía, puede iniciar contracciones e inducir el parto. El procedimiento generalmente se realiza si el cuello uterino ya está dilatado y delgado y tu bebé descendió. Según el mismo sitio, la mayoría de las mujeres comenzarán el trabajo de parto dentro de unas horas después de que se rompa su saco amniótico.

Prostaglandinas.
Si tu cuello uterino no está maduro o dilatado lo suficiente como para romper tu fuente, tu doctor podría usar prostaglandinas sintéticas, hormonas que el cuerpo produce durante el parto, para adelgazar y dilatar el cuello uterino. Según la APA, insertarán un supositorio que contiene prostaglandinas en la vagina para ayudar a madurar el cuello uterino e inducir el parto.

Sonda de Foley.
Según la Clínica Mayo, una forma de inducir el parto es insertar un catéter pequeño con un globo en un extremo en el cuello uterino. Una vez dentro, tu médico llenará el balón con solución salina y esta presión ayudar a dilatar y madurar el cuello uterino.

Oxitocina.
De acuerdo con ACOG, la oxitocina es una hormona que tu cuerpo produce naturalmente durante el parto. Pitocin es la marca de oxitocina sintética que se usa comúnmente para inducir el parto al hacer que el útero se contraiga. La pitocina puede usarse por sí misma para aumentar o inducir el trabajo de parto o junto con prostaglandinas u otros métodos. Aunque se dice que las contracciones de Pitocin causan significativamente más dolor que las normales, según ACOG, depende totalmente de la dosis utilizada y de cómo responde tu cuerpo a la medicación.