Esta ronda de temporada de resfriados y gripe no es solo peligrosa, sino mortal. Según los informes, esta poderosa cepa de la gripe, H3N2, es una forma más fuerte y duradera de la gripe, poniendo en riesgo a los ya vulnerables. Y aunque esta cepa increíblemente virulenta no discrimina, los mayores de 65 años, las personas con enfermedades crónicas y los niños son especialmente susceptibles. Entonces, con eso en mente, esto es lo que debes hacer si tu hijo tiene gripe, según los expertos. Después de todo, nunca puedes ser demasiado cuidadosa.

El Dr. Dan Jernigan, director de la división de influenza del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), dijo a ABC Action News que “este es el primer año que tenemos todo el territorio continental de Estados Unidos en el mismo nivel (de actividad de la gripe) y al mismo tiempo”.

Un informe semanal reciente de los CDC estima que ya han ocurrido 20 muertes pediátricas esta temporada y los niños menores de 5 años corren mayor riesgo. Un asombroso 22,7% de las hospitalizaciones confirmadas por laboratorio relacionadas con la influenza por cada 100,000 personas se informó la semana que finalizó el 6 de enero, que es casi el doble del 13,7% de la semana anterior. Mientras que los mayores de 65 años constituyen la mayoría de los números antes mencionados, los adultos sanos también se han visto afectados. Tal vez lo más perturbador sea el hecho de que los niños se encuentran entre los porcentajes más altos de hospitalización y muerte por neumonía y complicaciones relacionadas con la influenza, incluida la sepsis.

Las estadísticas, son alarmantes. Y debido a que el virus de la gripe se transmite al hablar, toser, estornudar y tocar una superficie que ha entrado en contacto con el virus, se propaga de manera rápida y relativamente fácil. De acuerdo con el CDC, eres contagioso un día antes de que te enfermas y puede seguirlo siendo por hasta 5-7 días después de la transmisión. Afortunadamente, como madre hay algunos pasos que puedes tomar si tu pequeño tiene gripe para asegurarte de que sanen en muy poco tiempo.

Aunque algunos expertos dicen que es solo un 30% efectiva, el primer paso es asegurarte de que tu familia sea vacunada contra la gripe lo antes posible. Si no lo has hecho, es hora de hacer esa cita. Como la primera gran defensa contra la gripe, la vacuna protege contra tres o cuatro virus, H1N1, H3N2 y uno o dos virus de la influenza B, a partir de los 6 meses de edad. La vacuna también reduce las posibilidades de transmitir la gripe a otros miembros de tu familia.

CNN te aconseja buscar tratamiento médico si tu niño muestra cualquiera de los siguientes sistemas relacionados con la gripe: fiebre alta, dificultad para respirar o respiración rápida, color de piel azulado, mareos, vómitos, no beber suficientes líquidos, no despertar o no interactuar, irritabilidad y no desear que lo sostengas, si los síntomas mejoran pero luego regresan o crecen, o una fiebre con sarpullido. Asimismo, Time sugiere ir al médico si tu hijo se queja de dificultad respiratoria, estornudos, congestión nasal y dolor de garganta. Los medicamentos antivirales funcionan mejor si tu hijo es recetado dentro de las 48 horas de haberse enfermado, por lo que no debes posponer la visita al médico o la atención urgente, incluso si no estás segura de que sea lo suficientemente “malo”. La intervención temprana importa.

El CDC aconseja a los padres que mantengan a sus hijos en casa hasta 24 horas después de que se disipe la fiebre. Una fiebre se considera “una temperatura mayor o igual a 37.8 grados Celsius. Después de consultar con tu médico, hay analgésicos de venta sin receta apropiado para reducir la temperatura y la duración de la fiebre que puedes elegir administrarle a tu hijo. Asegúrate de que también descansen y consuman suficiente líquido, al darles a beber electrolitos orales.

Algunas otras formas de prevenir la propagación del virus, agrega el CDC, es mantener a tu hijo en una habitación separada de la casa, no permitir que comparta comida o bebida con otra persona y trata de tener solo un cuidador con el niño para mantener el potencial de contaminación cruzada al mínimo. Si ya haces todo lo anterior, simplemente sé paciente. Esta cepa de virus en particular dura un poco más que las versiones anteriores, por lo que no te sorprendas si tu hijo permanece enfermo por más tiempo de lo usual y como siempre, confía en tu instinto. Si su hijo no mejora, es mejor ponerse en contacto con tu médico o dirigirse al hospital más cercano.