Para muchas personas, una copa de vino tinto, siempre es ideal para relajarse al final de un largo día. Mientras que otros recurren a una cerveza o una bebida mixta, el vino tinto es el favorito de las mujeres… sobre todo después de convertirnos en mamás y necesitar ese rato de relajación para nosotras. Sin embargo, ¿sabías que podrías ser alérgica a este vino?

Las alergias específicas del vino, como los dolores de estómago o las sibilancias, son un poco diferentes de las alergias generales al alcohol. Según Healthline, es más probable que las alergias al vino tinto sean causadas por sulfitos, histamina u otros compuestos en éste. El vino tinto en realidad contiene más de estas piezas ocasionalmente problemáticas más que incluso el vino blanco. Aunque las pieles de la uva son responsables de algunos de los beneficios para la salud del vino, de acuerdo con la Clínica Mayo, son prácticamente anuladas por la caída de una reacción alérgica. Por lo tanto, toma nota si estás experimentando alguno de estos signos en correlación con esta bebida alcohólica.

Aunque tener algunos síntomas de alergia al vino tinto no significa que ya no puedas beberlo, es triste darte cuenta de que ya no es la mejor opción ni la más agradable para relajarte tras un día pesado. La buena noticia es que conocer algunos de los síntomas de una alergia al vino tinto puede ayudarte a detenerlos para siempre. Y no te asustes de más: ser alérgico al vino tinto no significa automáticamente que seas alérgica al alcohol en general.

Uno de los síntomas es la dificultad para respirar. El cual es bastante común en correlación con la mayoría de los tipos de reacciones alérgicas, pero es importante tenerlo en cuenta. Según Bustle, “sibilancias, dificultad para respirar, tos y otros síntomas respiratorios pueden ser causados ​​por los sulfitos en el vino (especialmente si tienes asma)”. Por lo tanto, si a menudo sientes que te fallan los pulmones al ir a dormir después de tomar este vino, es probable que tengas reacción alérgica.

Otro son reacciones en la piel, como ponerte súper roja y llena de manchas. Aunque es común que a algunas personas les pase esto cuando beben cualquier tipo de alcohol, debido a la histamina mencionada anteriormente, es mucho más común con el vino tinto. Everyday Health compartió que si notas enrojecimiento, picazón o problemas cutáneos en relación con el vino, es una gran pista que hay una alergia allí.

Healthline señaló que si notas dolor abdominal, náuseas o diarrea después de beber vino tinto, es una señal de que eres alérgica a éste. También apuntó que en realidad puedes desarrollar una alergia al alcohol en cualquier momento de tu vida, y “la aparición repentina de síntomas también puede ser causada por una intolerancia recientemente desarrollada”. Entonces, incluso si nunca habías tenido un problema anteriormente, eso no significa que estés libre por el resto de tu vida, por lo tanto, no descartes una alergia después.

Otra reacción son los dolores de cabeza y migrañas incluso después de un vaso o dos de vino. De acuerdo con el artículo de Bustle antes mencionado, la histamina contenida en el vino y la histamina en tu cuerpo pueden producir dolores de cabeza. Así que, lamentablemente, si sientes que un autobús te atropelló todas las mañanas después de beber vino tinto, es una señal de que deberías considerar evitarlo, a menos que estés dispuesta a soportar una resaca asesina después de cada degustación. Afortunadamente, no tienes que omitir el vino tinto por completo. Hay vinos bajos en histamina disponibles que tu cuerpo podría tolerar mejor.

Al igual que con cualquier cosa, si los síntomas son severos, lo mejor es hablar con tu médico, para descartar que la alergia sea algo peor.