Con todos los sentimientos maravillosos que acompañan a la lactancia materna, puedes encontrar algunos dolorosos también. Una enfermedad común entre las madres que amamantan es el dolor del pezón, y algunas mujeres juran que remedios naturales como el aceite de coco, las ha ayudado. Puede que no te sorprenda, porque parece que el aceite de coco está en todos lados en estos días y se ha promocionado como un remedio para curar la piel, por lo que si tienes dolor, ardor o ampollas en los pezones, ¿puedes usar aceite de coco para el dolor del pezón?

La Consultora de Lactancia Certificada por la Junta Internacional (IBCLC) Tera Hamann dice que el aceite de coco es en realidad lo que ella recomienda sobre la lanolina para el dolor del pezón. Ella dice que, si bien la lanolina es ideal para la piel agrietada, no tiene propiedades curativas. El aceite de coco, por otro lado, es un antimicrobiano y antimicótico natural, por lo que no solo es útil en la curación, sino que también se puede usar para prevenir infecciones. La mejor parte del uso de aceite de coco en los pezones es que es seguro para tu bebé, dice Hamann, para que no tengas que limpiarlo antes de alimentarlo.

Otra asesora de IBCLC, Kristin Gourley dice que el aceite de coco es útil para curar heridas, y es seguro de usar mientras amamantas, lo que elimina la necesidad de lavar continuamente los pezones adoloridos. Gourley sugiere que si no tienes aceite de coco a mano, el aceite de oliva también tiene propiedades similares y puede calmar el dolor del pezón también. Ella agrega que las propiedades humectantes del coco y del aceite de oliva pueden promover el tejido sano en general, y son mucho menos pegajosas que la lanolina, que se usa popularmente para tratar los pezones. Pero ojo, el aceite de oliva sí debes limpiarlo antes que tu bebé coma.

Las propiedades antibacterianas e hidratantes de los aceites de coco se han estudiado más exhaustivamente en los últimos años. Junto con los estudios sobre los beneficios para la salud del consumo de aceite de coco, existen amplios estudios sobre su viabilidad como remedio para la piel, también. De acuerdo con Dermatology Today, un estudio de 2004 encontró que es un humectante significativamente eficiente, que puede hidratar la piel y aumentar los niveles de lípidos en ésta. Otro estudio en el Natural Medicine Journal descubrió que un componente clave del aceite de coco es el ácido láurico, que ha demostrado ayudar a matar una gran variedad de bacterias en la piel.

Pero no todo el aceite de coco es el mismo. Si alguna vez has buscado en tu tienda de comestibles local aceites de coco, seguro has encontrado numerosos tipos, desde líquidos a sólidos, y que varían en color. De acuerdo con Coconuts y Kettlebells, el aceite de coco crudo, orgánico y sin refinar conservará la mayor cantidad de ácido láurico, fitonutrientes y polifenoles, en comparación con el aceite de coco refinado, purificado o líquido. Cuando se refina o se licua, muchas de las propiedades curativas se pierden, por lo que puede no ser tan útil como las versiones sin refinar.

Si deseas llevar un régimen de cuidado del pezón de aceite de coco un paso más allá, puedes amplificarlo con este remedio para pezones adoloridos. Para hacerlo,, todo lo que necesitas es una cuchara de vinagre de sidra de manzana cruda, una taza de agua filtrada, probióticos infantiles en polvo, aceite de coco crudo, una botella de compresión y bolas de algodón orgánico. Después de cada alimentación, rocía una bola de algodón con una mezcla de agua y vinagre, seguido de una pizca de aceite de coco y luego una pizca de polvo probiótico. Es un poco más complicado que el aceite de coco recto, pero según expertos hace maravillas.

Entonces, ya sea que lo mezcles con cualquier cosa o uses solo aceite, recuerda que cualquier aceite, incluido el de coco, manchará tu ropa. “Si quieres ponerte aceite en los pezones, debes usar almohadillas para el pecho”, sugiere Gourley, “para que no tengas manchas de grasa en el sujetador”. Si tus pezones están demasiado adoloridos por la fricción, siempre puedes ponerte una vieja camisa suave que no te importa manchar. Afortunadamente, el dolor en los pezones no durará demasiado, pero si continúa, trata de hablar con una especialista en lactancia que te guiará en las técnicas adecuadas de enganche y te ayudará a volver a la normalidad.