La crianza de los hijos es un trabajo duro. Así que con el fin de sobrevivir y proteger esa relación de pareja, especialmente en los primeros días, es necesario convertirse en un equipo.

En ese primer mes después del parto las cosas pueden sentirse bastante agotadoras e inestables. Pero una vez que aprendiste a cambiar pañales, tienes un mínimo de sueño, rutinas a la hora de acostarse y de alimentar, tú y tu pareja estarán mucho mejor equipados para cambiar su enfoque y ahí es cuando debes intentar hacer lo siguiente para mantener esa unión fuerte. Después de todo, tener un hijo no significa que tu relación ya no importa.

Pregúntense acerca de sus días:
Todo ha sido sobre el bebé durante los primeros días posparto, semanas e incluso meses. Es difícil concentrarse en cualquier otra cosa cuando este pequeño humano necesita tanto de ti. Sin embargo, necesitas centrarte un poco en tu pareja. Tras el primer mes posparto, trata de platicar más con tu esposo o compañero; cuéntale de tu día, que él te cuente del suyo. Siempre es bueno hablar.

Escúchense:
Trata de hacer todo lo posible para darle a tu pareja toda su atención durante al menos tres a cinco minutos al día. Y que él haga lo mismo.

Tomen turnos cambiando a su bebé:
Los primeros días serán complicados para ambos, sobre todo si nunca antes habían puesto o cambiado un pañal. Pero una vez que los dos hayan ensayado varias veces y dominen este “arte”; lo justo es que tomen turnos para cambiarlos.

Tomen turnos alimentando a su bebé:
Algunas mamás se dedican exclusivamente a la lactancia materna, ¡y eso es genial! Si no quieres que tu pareja maneje las responsabilidades de alimentación, por cualquier razón, eso es completamente tu derecho. Pero si de vez en cuando puedes sacarte leche, almacenarla y dejarla en el refri o usas fórmula, es excelente que tu pareja a veces le dé la mamila. Te ayudará a descansar un poco y a él a tener una relación más cercana con su bebé.

Tomen turnos haciendo las cosas del hogar:
Lavar ropa, platos, cocinar, limpiar la casa; si eres quien más se encarga del bebé, entonces estas son tares que tu esposo puede hacer a la perfección. Pero si él se dedica a cuidar del bebé por un largo periodo del tiempo, entonces tú también puedes realizarlas. Debe ser recíproco.

Hagan espacio para que su pareja tome un baño solo:
Apóyense para poder tomar un baño en privado. No una ducha rápida, no un baño juntos, no con el bebé. Un baño como debe de ser. De 5 a 15 minutos. Es de las cosas que más ayudan al cuerpo y donde pueden apoyarse más.

Tengan sexo:
Tal vez ya no sea como antes. Pero hagan espacio para no perder los momentos de intimidad. A ti te ayudará a recuperar la autoestima tras el bebé y a tu pareja a no sentirse olvidado.