La ciencia y tecnología avanzan cada día más para ofrecernos una mejor vida… y salvar muchas. Como fue el caso de los bebés de Frankielen da Silva Zampoli Padilha, de 21 años, quien sufrió un derrame que la dejó con muerte cerebral. Pero cuando esto pasó, la madre joven tenía ya nueve semanas de embarazo con gemelos.

Cuando esto sucedió, los médicos del Hospital Nosso Senhora do Rocio en Brasil advirtieron al marido de Frankielen, Muriel, que intentarían mantener con vida a los gemelos en el vientre de su madre fallecida, pero que los pequeños probablemente no sobrevivirían. El trauma que sufrió Frankielen sería demasiado para ellos y sus corazones dejarían de latir. Así que Muriel se hizo a la idea que una vez que llegara ese horrible día, podía apagar el soporte vital y enterrar a su esposa y a sus dos bebés.

Pero sus pequeños corazones nunca se detuvieron.

Los días se convirtieron en semanas y los embriones jóvenes florecieron, sobreviviendo contra todo pronóstico en el vientre de su madre. Estuvieron allí por un total de 123 días hasta que fueron entregados a través de una cesárea.

Según médicos alrededor de todo el mundo, este es el período más largo de tiempo en la historia médica que una mujer embarazada de muerte cerebral se mantuvo con signos vitales gracias a el soporte de vida.

Los bebés nacieron sanos pero prematuros y requirieron tres meses en la unidad de cuidados intensivos neonatales. Pero hoy en día, los gemelos están en casa con su padre y su abuela, la madre de Frankielen, Angela Silva.

“Estoy muy orgullosa de mi hija”, dijo Silva a medios de comunicación brasileños: “Ha sido difícil perderla, pero fue una guerrera hasta el final, protegiendo a sus hermosos hijos y dándoles vida hasta el día en que finalmente murió”.