Cuando estaba embarazada de mi primer hijo, fue que obtuve información sobre la violencia obstétrica, antes de eso no sabia y menos imaginaba que existía un maltrato hacia la mujer en el trabajo de parto y al momento del nacimiento de su hijo.

Mi hermana María, vió un programa de televisión, en el que se exponía un caso de violencia obstétrica, y ante su indignación y asombro, investigó la pagina que proporcionó el mismo programa para que las mujeres se informaran sobre el tema. Así que al tener la información completa la compartió conmigo. Yo en verdad estaba asombrada, sentía un dolor inmenso por esas mujeres que han sufrido violencia en un momento tan vulnerable como el del nacimiento de sus hijos. En la pagina web que informaba sobre la violencia obstétrica, recomendaba informarse para evitar vivir esas lamentables situaciones. Y mencionaban algunos centros de educación perinatal que existen en México, en los cuales te informan no solo sobre el proceso del nacimiento, sino también sobre los derechos de la mujer, y como elegir los profesionales de la salud que apoyen un nacimiento humanizado, y no hagan procedimientos innecesarios que violenten a la mujer o al bebe.

Gracias a esta información busque el centro de educación perinatal que me apoyó y me dio toda la información para poder ELEGIR, el parto que quería tener. Y así pude entrevistar a los profesionales de la salud que me asistirían en mi parto, porque ellos son en quienes pones toda tu confianza y la vida de tu hijo, y al final se que elegí bien, pues el momento fue de lo mas hermoso y respetado.

Entreviste a varios médicos Giencologos, entre ellos la Doctora que llevo mi registro mensual por 7 meses, y me dí cuenta que ella no estaba para nada a favor del parto, para comenzar presumía hacer muchas cecearas al día, de forma rápida, jamás hablo sobre los beneficios de un parto, y hablaba de lo cómodo que era programar la fecha de una cesárea para la madre.

Por supuesto elegí al Ginecólogo que accedió a todas mis peticiones, parto natural en agua, no episiotomía, no enema, apego inmediato con mi bebe. Tabmien pedí referencias de el y todas eran buenas, era un Doctor Pro Parto, y no hacia cesáreas a menos que fueran necesarias. Asi que teniendo ya la confianza lo contraté y fue quién me apoyo en mi parto.

El Pediatra Humanista que entreviste, me dejó maravillada pues accedía al apego inmediato, y no le hacia ningún procedimiento al bebe de inmeditao si yo se lo pedía, podía esperar a pesarlo, medirlo o aplicare vacunas, respetando ese momento hermoso del nacimiento y así hacer la llegada del bebe un acontecimiento tranquilo, suave y armonioso.

La información que quiero que tengas para que evites vivir la violencia obstétrica es la siguiente:

¿Qué es la Violencia Obstétrica?

La violencia obstétrica son todas las acciones y conductas que deshumanizan y minimizan a las mujeres durante todo su proceso de embarazo, parto y la etapa posterior y son cometidas por el sistema de salud tanto público como privado.

Este tipo de violencia se manifiesta a través de malos tratos, humillaciones, no proporcionando información sobre los tratamientos y tiene como consecuencia la pérdida de libertad, autonomía y capacidad de decidir libremente sobre sus cuerpos y sexualidad.

Muchas de estas experiencias pueden resultar traumáticas y van más allá de las mujeres embarazas, ya que los malos tratos también pueden ser dirigidos a sus familiares.

En todo el mundo, muchas mujeres sufren un trato irrespetuoso y ofensivo durante el parto en centros de salud, que no solo viola los derechos de las mujeres a una atención respetuosa, sino que también amenaza sus derechos a la vida, la salud, la integridad física y la no discriminación1 .

¿Cómo se manifiesta la violencia obstétrica?

La violencia obstétrica incluye:

  • Comentarios hirientes como “si te gustó hacerlo, ahora aguántate”.
  • Impedir a las mujeres expresarse durante todo el proceso: “ya no llores, no grites, no es para tanto”.
    Comentarios relacionados con la sexualidad de las mujeres o que las ridiculizan, infantilizan o minimizan su experiencia o dolor.
  • Falta de información.
  • No prestar la atención médica adecuada y a tiempo.
  • Presionar para que decidan uno u otro método de anticoncepción.
  • Esterilizaciones forzadas.

La violencia obstétrica se presenta:

  • Cuando nos infunden miedo, y accedemos a una inducción innecesaria del parto, sugerida por el ginecólogo por una razón que no responde a la evidencia científica, sin habernos sometido a ninguna prueba cuyo resultado avale dicha intervención, si no simplemente para que el medico ajuste nuestro parto a su agenda.
  • Cuando nos mienten diciendo que tenemos que someternos obligatoriamente a una cesárea porque el bebé viene de nalgas, o hemos sufrido una cesárea previa.
  • Cuando nos regañan por haber engordado poco o mucho durante el embarazo, haciéndonos sentir culpables y enfermas, y con cuerpo imperfecto e incapaz.
  • Cuando nos aplican innecesariamente procedimientos o intervenciones sin informarnos sólo porque es la rutina que establecen los protocolos hospitalarios.
  • Cuando rompen membranas (la fuente, la bolsa) o nos hacen una episiotomía sin permiso.
  • Cuando nos acusan de “no colaborar” cuando ni siquiera nos están dejando movernos durante el parto.
  • Cuando nos tratan con desprecio, no contestan a nuestras preguntas o nos sugieren que no nos informemos.
  • Cuando no aceptan nuestro plan de parto.
  • Cuando nos amenazan con no atendernos si no hacemos lo que ellos quieren que hagamos.
  • Cuando nos separan de nuestro bebé, cuando no nos dejan verlo o tocarlo, cuando nos dejan solas y muertas de miedo en recuperación sin saber cómo se encuentra nuestro hijo.
  • Cuando nos sugieren que no seremos capaces de parir sin pedir a gritos la epidural, cuando no nos apoyan moralmente durante el parto y no nos ofrecen alternativas para paliar el dolor.

Y todo esto tiene repercusiones físicas y emocionales en la madre. Por eso mi recomendación de que te informes y exijas tus derechos.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2014 se ha pronunciado alertando sobre el trato irrespetuoso que sufren en muchas ocasiones las mujeres y ha propuesto cinco medidas para combatir este tipo de violencia contra las mujeres:

  1. Mayor respaldo de los gobiernos y socios en el desarrollo, en relación con las investigaciones y acciones sobre el maltrato y la falta de respeto.
  2. Iniciar, respaldar y mantener programas diseñados para mejorar la calidad de la atención de la salud materna, centrándose en la atención respetuosa como componente esencial de la atención de calidad.
  3. Realzar el derecho de la mujer a recibir una atención de la salud digna y respetuosa en el embarazo y el parto.
  4. Es necesario generar datos relacionados con las prácticas de atención respetuosa e irrespetuosa, los sistemas de responsabilidad y el respaldo profesional valioso.
  5. Involucrar a las partes interesadas, incluidas las mujeres, en los esfuerzos para mejorar la calidad de la atención y eliminar las prácticas ofensivas e irrespetuosas. Te invitamos a ver este video de Icíar Bollaín

En México no existen estudios o informes cuantitativos sobre violencia obstétrica; sin embargo, nuestro país ocupa el cuarto lugar a nivel mundial en el uso de la práctica de cesárea sin indicación médica, en los sectores público y privado, lo que lleva a una forma común de violencia hacia las mujeres.

EN LA NORMA OFICIAL MEXICANA NOM-007-SSA2-2016, PARA LA ATENCION DE LA MUJER DURANTE EL EMBARAZO, PARTO Y PUERPERIO, Y DE LA PERSONA RECIEN NACIDA, Entre las regulaciones estan las siguientes:

5.5.1 En todo establecimiento para la atención médica se deben aplicar las normas y procedimientos para la atención del parto y favorecer la seguridad emocional de la mujer, así como su bienestar durante todo el proceso, siendo prioritario facilitar el parto. En especial, en mujeres primigestas, se debe propiciar la conducción no medicalizada del trabajo de parto y el parto fisiológico, siempre que no exista contraindicación médica u obstétrica. Estas medidas procuran la atención de calidad y respeto al derecho de la mujer a un parto espontáneo, así como reducir el índice de cesáreas, morbimortalidad y el riesgo de complicaciones a largo plazo.

5.5.3 Ninguna persona que preste servicios de ginecología y obstetricia, discriminará o ejercerá algún tipo de violencia hacia la mujer en trabajo de parto.

5.5.5 Durante el trabajo de parto se puede permitir la ingesta de líquidos a la paciente, de acuerdo a sus necesidades; se propiciará la deambulación alternada con reposo en posición sentada o de pie, siempre y cuando el establecimiento para la atención médica cuente con el espacio suficiente y seguro, respetando la posición en que la embarazada se sienta más cómoda, en tanto no exista contraindicación médica. Si la madre escoge recostarse deberá recomendarse el decúbito lateral izquierdo para prevenir hipotensión materna y riesgo de hipoxia fetal.

5.5.6 La prescripción de analgésicos, sedantes y anestesia durante el trabajo de parto se realizará según el criterio médico, basado en evidencias y con atención personalizada previa información y autorización de la paciente de conformidad con la Norma Oficial Mexicana citada en el punto 2.4 del Capítulo de Referencias, de la Norma.

5.5.7 La inducción y conducción del trabajo de parto, así como la ruptura artificial de las membranas, se debe realizar según el criterio médico, basado en evidencias y con atención personalizada previa información y autorización de la paciente, mediante el consentimiento informado.

5.5.8 La utilización de auxiliares de diagnóstico de laboratorio y gabinete como la cardiotocografía y el ultrasonido, debe obedecer a indicaciones específicas. Los procedimientos invasivos requieren del consentimiento informado de la paciente por escrito.

5.5.9 A la recepción de la embarazada en trabajo de parto, la tricotomía vulvo perineal y la aplicación de enema evacuante, no serán de aplicación obligatoria, excepto en los casos que por indicación médica así se requiera. Asimismo, se debe reducir el número de tactos vaginales. En todo caso, la mujer debe ser informada previamente y debe existir nota médica en el expediente clínico. Se recomienda realizar episiotomía de manera selectiva dependiendo de la valoración clínica.

5.5.14 Durante el periodo expulsivo, no debe realizarse la maniobra de Kristeller ya que los riesgos para la madre y el feto son elevados.

5.5.15 La atención del parto respetuoso con pertinencia cultural se debe promover en los establecimientos para la atención médica de segundo nivel de atención, mediante la adecuación de espacios físicos, procedimientos de atención, implementos utilizados y permitiendo la elección de la posición por parte de la mujer. Esto se debe efectuar de acuerdo a las condiciones clínicas de la embarazada y del producto, así como de la adecuación de la infraestructura hospitalaria y la capacitación del personal para este tipo de atención. Dicha capacitación debe ser promovida por las instituciones que forman parte del Sistema Nacional de Salud, en los lugares donde es culturalmente utilizado y aceptado.

5.5.16 El pinzamiento y corte del cordón umbilical se debe realizar de 30 a 60 segundos después del nacimiento, aun siendo prematuros, manteniendo a la persona recién nacida por abajo del nivel de la placenta. En caso de madre Rh negativo no isoinmunizada, circular de cordón al cuello y sufrimiento fetal agudo, el pinzamiento y corte debe ser inmediato.

5.5.18 La revisión manual o instrumental de la cavidad uterina no debe realizarse de manera rutinaria; no es una maniobra sustitutiva de la comprobación de la integridad de la placenta. Sólo ante la sospecha de retención de restos placentarios, previa información a la paciente, bajo estricta técnica de antisepsia y analgesia, se debe realizar la revisión de la cavidad uterina por personal calificado.

5.7.2 Todo establecimiento para la atención médica que proporcione atención obstétrica debe tener reglamentados procedimientos para la atención de la persona recién nacida que incluyan:

5.7.2.10 Alojamiento conjunto;

5.7.2.11 Alimentación exclusiva al seno materno y/o leche humana, y

Espero que esta información te sea de mucha utilidad. Y puedas vivir un trabajo de parto respetuoso y tranquilo.

Bendiciones de mi corazón al tuyo.


Refencias

http://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5432289&fecha=07/04/2016

https://www.medicosdelmundo.org/index.php/mod.documentos/mem.descargar/fichero.documentos_7_Violencia_Obstetrica_17c9d835%232E%23pdf

http://deprofesionmami.blogspot.mx/2014/11/ejemplos-y-consecuencias-de-la.html