La alimentación durante el embarazo es importantísima, hemos hablado varias veces en este sitio sobre el tema, incluso la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición fundamenta que la dieta durante el embarazo debe ser equilibrada, tanto en cantidad como en calidad, para conseguir mantener un buen estado nutricional.

Un estudio reciente realizado por un grupo de investigadores de la Universidad de Cambridge, llegó a la conclusión de que incluir alta cantidad de grasas y azúcar en la alimentación durante el embarazo altera los procesos metabólicos en el organismo de la madre, lo cual puede desencadenar y desarrollar potenciales complicaciones de salud en la madre y su bebé.

El experimento consistió en estudiar a ratas preñadas y alimentarlas con dietas altas en azúcar y grasa, los investigadores encontraron que el excesivo consumo de estos alimentos alcanza la tolerancia de la madre a la glucosa además de una mayor sensibilidad a la insulida, lo que cambia su disposición a desarrollar complicaciones de salud después del parto y por esto se puede desarrollar diabetes tipo 2, obesidad y problemas cardiovasculares.

Aquí esta enlistado el decálogo que la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición recomienda practiques:

  • El aumento de peso se recomienda que sea de 6 y 12 kilos. Es preferible que las embarazadas con bajo peso aumenten, mientras que las que comienzan con exceso de peso deben limitar su aumento, sin embargo señalan que no debe ser inferior a 6 kilos.
  • No hagas dietas pobres en calorías. El embarazo no es momento para adelgazar. Simplemente mejora la calidad de lo que comes y elimina los “extras”.
  • Es ideal respetar los horarios de comida: Realiza de cuatro a cinco comidas diarias.
  • Toma suplementos de hierro, pero ayúdale a tu cuerpo a absorberlo:
  1. Come carne roja, ayuda a su absorción.
  2. Consume legumbres y vegetales, junto con vitamina C que lo encuentras en la naranja, mandarina, limón.
  3. Toma café o té  1 a 2 horas después de las comidas principales, pues su consumo disminuye la absorción del hierro de los alimentos
  • Aumenta el consumo de frutas y hortalizas, ideal para cubrir las necesidades de vitaminas y minerales.
  • Evita el “picoteo” entre horas, más si son ricos en grasa y azúcares.
  • No consumas alcohol

Si sientes náuseas y vómitos:

  • Disminuye el volumen de alimentos ingeridos.
  • Come menos cantidad pero más veces.
  • Evita los alimentos ricos en grasa.
  • En caso de reflujo, siga estas mismas indicaciones y evite comer en las horas previas a acostarse.

Últimas recomendaciones, si tienes estreñimiento toma mucha agua, consume vegetales, frutas, cereales integrales. Recuerda que es importante tu suplemento de ácido fólico desde que sabes que estas embarazada, consulta a tu doctor quien te asesorará.