Una de las razones más comunes por las que los recién nacidos lloran es porque el gas queda atrapado en el abdomen, causándoles cólicos e incomodidad para poder descansar.
Estás son algunas señales que confirmarían que el bebé tiene gas, son:
- Está susceptible toda la noche.
- Se la pasa estirando las piernas hacia arriba y se queja.
- El vientre está tenso.
Para ayudar a los bebés con el gas atrapado, hay tres ejercicios que a continuación se describirán:
- Realizar “bicicleta” con las piernas del bebé: Debes poner al bebé boca arriba y llevar las rodillas hasta su estómago, mientras las mueves en forma de bicicleta, eso se debe hacer varias veces al día y no cuando el bebé comienza a llorar.
- Masajear su vientre: Cuando el bebé se encuentra tranquilo, debe colocarse boca arriba y darle un masaje en el estómago con una loción para bebés. El masaje debe darse en dirección a las agujas del reloj, ya que es la dirección en la que el gas se mueve. Se puede comenzar por el ombligo y usar los dedos, ir masajeando hacia la derecha y gradualmente hacia fuera. El masaje nunca debe ser cuando el bebé comienza con las molestias, si se irrita por las noches, los masajes deben darse por la mañana o por la tarde.
- Tiempo boca abajo: Darle tiempo al bebé boca abajo, ayudará a reducir la acumulación de gases. Cuando coloca a su recién nacido sobre su estómago, ayuda a estirar los intestinos permitiendo que el gas se mueva fácilmente. Este tiempo debe ser corto y siempre estar pendiente de la seguridad de su pequeño.
Estos son algunos de los ejercicios que pueden ayudarte con tu recién nacido y sus gases, ser mamá por primera vez es una de las mejores etapas de la vida que tiene que disfrutarse en cada momento.