El milagro de la vida es hermoso, pero seamos honestas: el embarazo viene acompañado de algunos síntomas. ¿Qué hará tu cuerpo a continuación? ¡Quién sabe! Uno de esos efectos secundarios inconvenientes es la cantidad de sudor que produce tu cuerpo. Ya sea que estés durmiendo, haciendo ejercicio o simplemente tratando de llevar a cabo tus asuntos diarios, enfrentémoslo: necesitas algunos consejos de alivio para la sudoración del embarazo.

Los primeros grandes culpables del sudor del embarazo son tus senos. Si bien los sujetadores con aros o deportivos pueden ser más favorables para tus “chicas” más grandes, esos estilos tienden a atrapar el calor y también el sudor. El sitio web de Huggies sugiere buscar sujetadores de maternidad con bandas anchas que se sienten planas debajo de los senos y contra la caja torácica, preferiblemente de una combinación de algodón/elastano que permite que la piel respire.

¿Otro consejo poco conocido para el sudor debajo del seno durante el embarazo? Usar el polvo conocido como Gold Bond. Sí, está hecho para los pies, pero según Healthline, el polvo puede ser valioso para prevenir y tratar la erupción por calor debajo o entre los senos. Dado que el polvo está medicado, lo mejor es obtener la luz verde de tu médico o partera antes de aplicar.

Pero tus senos no son la única parte femenina del cuerpo que suda un poco más en estos días: tu entrepierna podría estar experimentando lo mismo. Un dermatólogo explicó a Women’s Health que hay dos tipos de glándulas sudoríparas, apocrinas y ecrinas, y que tu ingle tiene una mayor densidad de ambas que cualquier otra parte de tu cuerpo además de tus axilas.

Entonces, ¿qué puedes hacer sobre esa área? Según la Universidad de Iowa, usar Gold Bond en tu vulva no es médicamente riesgoso, pero debes consultar con tu doctor por si acaso. La universidad advierte contra las duchas vaginales, pero dice que un enjuague con bicarbonato de sodio puede ayudar a eliminar los olores vaginales. Pero la forma más básica de combatir el sudor en la entrepierna es simplemente ducharte todos los días (incluso dos veces al día si deseas) y cambiarte la ropa interior con frecuencia.

Por supuesto, no se puede hablar de sudor durante el embarazo sin hablar también de los bochornos. En 2010, la Universidad de Pensilvania publicó un estudio que descubrió que más de la mitad de las mujeres embarazadas se ven afectadas por los bochornos, la mayoría semanalmente durante la primera mitad del embarazo, informó Today’s Parent. La repentina embestida del calor corporal es el resultado de la fluctuación de los niveles de hormonas, es decir, el estrógeno.

Para combatir la sudoración nocturna del embarazo, Babble sugirió limpiar el aire acondicionado en tu dormitorio, no llevar nada a la cama y usar sábanas de algodón o percal. Si bien estos pueden ayudar y definitivamente no duelen, en sí no hay una cura infalible para los sudores nocturnos. Pero la buena noticia es que, en solo unos pocos meses la sudoración del embarazo será pasado.