El embarazo es sin dudas, un milagro. Pero en una cultura que valoriza los cuerpos femeninos delgados, es innegablemente angustioso ver cómo creces. Sabemos que definitivamente en el vientre ganaremos mucho peso, ¿pero ganas peso en todas partes cuando estás embarazada?

De acuerdo con la Asociación Estadounidense del Embarazo, las mujeres que comienzan sus viajes de nueve meses con un índice de masa corporal (IMC) promedio pueden esperar subir de 10 a 15 kilos. La buena noticia es que una gran parte de tu peso es en realidad agua, explicó el Dr. Jamil Abdur-Rahman, gineco-obstetra. Cuando estás embarazada, dice, tu volumen de sangre aumenta de 50 a 60%. Como resultado, obtienes un gran “espaciado de tercer espacio”, en el que el líquido que se escapa de los vasos sanguíneos se acumula en el tejido adiposo.

Quizá notes que ganas peso en la cara. Otras mujeres podrían notar que sus secciones medias o muslos están más hinchados de lo normal. Y todas se dan cuenta de que sus senos crecen al menos una copa más. “Gran parte del peso durante el embarazo -no todo, sino mucho- es el peso del agua, por lo que tiende a acumularse en las áreas donde se tiene más tejido adiposo para empezar”, explica Abdur-Rahman.

Curiosamente, tu peso también puede fluctuar en el transcurso de tu día muy embarazada. Según Adbur-Rahman, se sabe que el peso del agua cambia… y drásticamente, pero en general no es nada de que preocuparse. Si pesas 60 por la mañana y 68 por la noche, no ganaste 8 kilos en un día. Lo que estás viendo reflejado en la báscula es agua, chapoteo y acumulación en tu cuerpo. Mientras ganes peso con la recomendación de 10 a 15 kilos, no importa dónde lo ganes, “en realidad es solo el peso extra de agua, el peso del bebé, el peso del líquido amniótico y la placenta, y dentro de un par de semanas de parto, vuelves a la normalidad”, dice Abdur-Rahman.

Según la American Pregnancy Association, al final de tu tercer trimestre estás viendo aproximadamente 3.4 kilos de bebé, más de medio kilo de placenta, casi un kilo de peso adicional en el útero, casi un kilo de tejido mamario, 1 kilo de líquido amniótico y 3 kilos de reservas de grasa materna. Además de eso, puedes esperar ganar al menos 2 kilos de peso de agua.

El aumento de peso en el embarazo puede parecer incontrolable o extraño. Y tal vez no hay mujer que disfruta de sentirse hinchada todo el día, preguntándose si esto va a durar para siempre. Pero puede ser útil saber que el aumento de peso notable en las áreas grasas es probablemente solo agua, que tu cuerpo estará feliz de arrojar después de dar a luz.

Como regla general, Abdur-Rahamn aconseja a las pacientes que no consuman más de 350 a 550 calorías adicionales, según el trimestre en que se encuentren, para un aumento de peso saludable. “Si lo hacen, deberían ganar entre 9 y 14 kilos y debería resolverse unas pocas semanas después del parto”, dice. A fin de cuentas, ganas peso que en realidad es solo agua.