Mi ginecólogo me preguntó: ¿Lo vas a intentar? Y dije: “Por supuesto”.

Muchas pensaron que estaba loca pero estoy convencida que se puede hacer todo si nos organizamos. Nazareno y yo cumplimos 1 año de casados y como en algunas ocasiones lo publiqué, nosotros no nos regalamos cosas materiales, nos regalamos experiencias… así que estamos en camino a JAPÓN. Faltan 4 horas para llegar y aquí estoy escribiéndoles mientras todos duermen (perdón que no lo publique ayer ).

Tenía un gran conflicto, salir de viaje y no perder la lactancia. La lactancia para mí es tan importante, entiendo que hay mamás que no lo lograron, otras que no lo intentaron, pero yo lo intenté y lo logré y ahora no quiero perderla, así que me volví una productora de leche, mucha leche. Mi banco de leche es uno de mis grandes tesoros porque … ¡Ah, cómo cuesta juntarla!

Se requiere paciencia y disciplina, todos los días me levantaba antes que se levantara Lisa a juntar 10 onzas (yo tenía más leche en la mañana), después de 1 hora se levantaba Lisa y comenzábamos con sus tomas… ¡Tu bebé nunca se va a quedar sin leche! Te lo prometo…

Durante semanas logré juntar 370 onzas, ella toma aproximadamente 5 onzas por toma y calculé una toma cada 3 horas, aunque a veces pide cada 4 o 5 horas. Me costó mucho trabajo, pero sé que vale la pena el esfuerzo.

Estuve preguntándole a amigas, a mamás que habían viajado, si lo habían logrado y me dijeron que sí. Consiste en seguir sacándote leche cada 3 o 4 horas para no perder la producción. Me voy 8 días de viaje y planeo regresar y continuar con nuestra lactancia. Lisa se quedó con sus dos abuelas (la de Monterrey y la de Argentina) que viajaron para compartir con ella unos días y estoy segura de que estarán muy felices. Si te preguntas si extraño a mi bebé. La respuesta es obvia, ¡muchísimo!, pero también sé que este viaje es una gran oportunidad para gozar con mi esposo, y seguir construyendo juntos no sólo un año, sino muchos más. Como escribí hace poco: “Si ser mala madre es dejar a mi hija con sus abuelas amorosas para gozar con mi marido unos días, entonces sí soy una mala madre”.

Pero regresemos a lo que iba… Aquí estoy en este momento, mientras escribo este post, sentada en el baño con mi extractor eléctrico sacándome leche para no perder la lactancia y con un poco de tristeza ya que la tendré que tirar (en este punto si falla, ya que en un país como Japón, en donde no conozco a nadie, no puedo donarla: si saben de alguna mamá que necesite y viva acá, mándenme mensaje).

¡Querer es poder!, así que mándenme su buena vibra, ya les contaré cómo me va y si logré mi objetivo de no perder mi producción por el viaje. Cuando me fui a Nueva York solo fueron 4 días, aquí voy por el doble… ¡Pero sé que sí lo lograré!

Obvio me costará trabajo, y al menos entraré al baño 5 o 6 veces por día con mi mochila-maquinita-extractor eléctrico… pero todooo se puede. Les mando besos desde un avión que está a 13,000 kilómetros… Les escribo la próxima semana para platicarles cómo me fue.

P.D. 1 Cierro los ojos y le digo a Lisa lo mucho que la amo, estoy segura que me siente
P.D. 2 También les contaré la técnica de la blusa que no falla, para que no me extrañe
P.D. 3 ¡Un año de casados, dos de vivir juntos – wow se pasó rapidísimo!
P.D. 4 Regreso a trabajar a la TV el próximo año… ¡Me emociona muchísimo!
P.D. 5 Ya le corto porque si no, no acabo 🙂