Las imágenes del bautismo de un bebé en Rumania han sido tan impactantes, que dieron la vuelta al mundo en cuestión de segundos y causaron indignación entre usuarios de redes sociales, por la agresividad con la que el sacerdote intenta callar al pequeño desesperado que aparece en dicho video viral.

En el video, publicado originalmente por Russia Today, el sacerdote parece listo para poner al bebé en el pabellón, sin embargo el pequeño está llorando y jala demasiado la sotana del sacerdote. Los parientes sacan su mano de la sotana, pero su grito se vuelve más fuerte y jala de nuevo. Entonces el sacerdote trata de ponerlo en el agua pero no puede, hasta que encuentra una manera impactante para que deje de llorar: le pone la mano en la cara y le tapa la boca y la nariz con la palma de la mano.

Los familiares conmocionados se lo quitan de las manos… El sacerdote parece indignado y listo para irse. Incluso hace algunos movimientos nerviosos para quitarse la túnica. Pero para el final de la grabación, toma de nuevo al bebé, le vuelve a cerrar la boca y la nariz, le pide a los familiares que sostengan su túnica para que el bebé no vuelva a jalarla, y lo sumerge vigorosamente en el pabellón tres veces como exige la iglesia.

Quien al parecer es la madre del pequeño, se muestra impactada y sólo muestra una risa nerviosa cuando todo el proceso termina y mientras su hijo continúa llorando y el sacerdote se retira molesto. ¿Qué les pareció el video de este bautismo, creen que a veces se debe aplicar un poco de disciplina física para lograr las cosas o que el bebé era demasiado pequeño y el sacerdote exageró sus acciones?