Este es el momento conmovedor de un niño que sobrevivió a el terrible terremoto que azotó la frontera entre el país de Irán e Irak, llevó a su amiguita de la mano para pedirle a los trabajadores voluntarios, que le dieran un paquete de alimentos, porque la pequeña no había comido.

El niño, que parece tener alrededor de cinco años, se acercó a los trabajadores de la Media Luna Roja que estaban repartiendo paquetes de alimentos en la provincia occidental de Kermanshah, tras un terremoto ocurrido la semana pasada, que mató a más de 530 e hirió a 8,200.

Según el video, el niño se acercó a los trabajadores de la asistencia y dijo: “No le dieron ningún alimento”. Mientras señalaba a su pequeña amiga. Entonces un trabajador de ayuda le entrega a la niña un pequeño paquete de comida y una botella de Coca Cola.

El niño se da vuelta para alejarse cuando el asistente social lo detiene, lo alaba y le entrega su propio paquete de almuerzo y refresco.

Las imágenes se hicieron virales de inmediato y brindaron esperanza a la gente, tras ver la tremenda tragedia, que esta zona, considerada muy humilde, ha tenido que atravesar tras esta catástrofe natural de 7.3 grados. Funcionarios iraníes se han quejado de que las continuas sanciones estadounidenses han obstaculizado los esfuerzos de socorro ya que los iraníes-estadounidenses tienen prohibido enviar dinero al país.

Las transferencias bancarias directas desde Estados Unidos a Irán siguen prohibidas. También existen otras prohibiciones, aunque en el pasado los Estados Unidos las levantaron temporalmente en respuesta a desastres.

En Kouik, un pueblo al norte de la ciudad maltratada de Sar-e Pol-e Zahab, un convoy de unas 20 ambulancias llegó con medicamentos, mientras que los equipos de la Media Luna Roja trajeron tiendas de campaña, agua, alimentos y mantas. Pero gran parte de la asistencia provino de voluntarios, algunos de los cuales viajaron a más de 60 millas de una provincia vecina.

‘¡Dios los bendiga!’ el residente Abdol Gader Ziaie, de 45 años, dijo de los que ayudan, pero ‘necesitamos agua potable, electricidad y baños móviles’. Los aldeanos han levantado tiendas alrededor de los escombros y han logrado rescatar algunas pertenencias, pero aún viven en condiciones aún peores de las que se encontraban antes del temblor. Ojalá esta grabación de dos niños inocentes, ayude a otros países a enviar más ayuda.