Cuando estamos embarazadas, una parte de la emoción es que queremos ver esa pancita crecer y presumirla a amigos, sacarnos fotos y tocarla diario. Entonces, ¿cuándo a la mayoría de las mujeres se les empieza a notar el embarazo? Hay un amplio espectro.

Margaret Buxton, enfermera certificada en baby + co, una red de centros de salud y bienestar para mujeres, dice que puedes notar tu pancita antes de lo que te imaginas. “Las próximas mamás pueden empezar a ver un pequeño bulto para el final de su primer trimestre. Sin embargo, hay algunas mujeres que no empiezan a mostrar hasta el segundo trimestre. Esto no es algo de que preocuparse. Desde las semanas 13 a 20, las mujeres deben esperar notar ese cambio”.

Una ventana de 7 semanas es ciertamente una amplia gama, pero los factores en juego son muchos. Una consideración es si este es tu primer embarazo o no, como Buxton explica “las madres que tienen su primer bebé tardan más en mostrar, y aquellas que tienen su segundo o más allá a menudo muestran más pronto”.

El tipo de cuerpo también importa mucho, ya que a las mujeres altas se les nota más tarde, al igual que las mujeres más pequeñas con torsos largos y las que tienen pelvis más profundas. Y, por supuesto, las mujeres que llevan más de un bebé muy probablemente desarrollarán una pancita antes.

Para explicar por qué el tipo de cuerpo importa, Buxton explica que el espacio más vertical permite que el bebé se estire, lo que significa un protuberancia menos prominente. Ella continúa mencionando: “Si llevas más peso en el abdomen, eso también contribuye a un tamaño y una forma diferentes a tu protuberancia”. Así, mientras que las mujeres más cortas se verán visiblemente embarazadas después de la concepción, las altas pueden tardar mucho más en ver el cambio.

Pero no es sólo tu estructura física lo que puede afectar. Factores como el IMC, el metabolismo y hasta gases pueden hacer que tu pancita parezca más grande por un tiempo y puedes notar un poco de fluctuación día a día.

Pero en términos generales, después del primer trimestre, las cosas se aceleran para la mayoría. Según Buxton, después de la semana 13, las mujeres suelen ganar un promedio de casi medio kilo a la semana, por lo que la pancita poco a poco se verá. “Cada embarazo es diferente, así que mientras que las semanas anteriores son típicas para la mayoría de las mujeres, debemos tener en cuenta que esto es una generalización”.

Entonces, ¿deberías preocuparte si todavía no se te ve, por ejemplo, a mitad de tu segundo trimestre? No, a menos que tu médico tenga razones para hacerlo. Buxton explica que parte de la atención prenatal de rutina es monitorear el crecimiento y desarrollo del bebé, y una de las formas en que se hace es medir la protuberancia en cada visita. Si tu ginecólogo o partera está preocupado por el crecimiento de tu bebé, se te pedirá una ecografía.

Buxton enfatiza que compararse con otras mujeres nunca ha salido bien para nadie. “Las mujeres no deberían preocuparse si empiezan a mostrar más temprano o más tarde. Cada embarazo es diferente, por lo que cada persona va a experimentar diferentes momentos de cuando su bulto se mostrará”.