Los padres, maestros y otros adultos que cuidan a menudo de nuestros hijos, les enseñan las pautas para andar en bicicleta, cuidar el agua y la seguridad en las calles. Los niños no tienen miedo de las bicicletas, piscinas y pasos de peatones como resultado de esto. Entonces enseñar a los niños sobre el acoso sexual es la mejor manera de ayudar a mantenerlos seguros. Y hoy te damos algunas pautas para que tus pequeños aprendan desde pequeños a evitar este tipo de vejaciones.

  • Enséñale a tus hijos, los nombres reales de sus partes del cuerpo, incluyendo sus partes privadas, para que puedan hablar de las cosas que suceden a sus cuerpos de una manera que otros entiendan.
  • No guardar secretos. Dile a tus hijos que te informen si un niño o un adulto juegan juegos secretos o les dicen que algo malo sucederá si no guardan el secreto.
  • Que los adultos no siempre tienen razón. Dile a tus hijos que hablen contigo si no se sienten bien acerca de algo que un adulto dice o hace.
  • Para saber si algo sucede. Deja a tus niños saber que si dicen que alguien los ha tocado, tú les creerás y no te enojarás con ellos. Diles que los amas y ayudarás a mantenerlos seguros.

Repite instrucciones de seguridad simples a menudo.

“Si te toca una persona de una manera que no te sientes bien, dímelo. Yo te creeré y te ayudaré”.
“Los adultos no necesitan tocar a los niños en áreas privadas a menos que sea por razones de salud o higiene”.
“Nunca te vayas o subas a un auto con un adulto que no conoces, no importa lo que te digan”.
“Confía en tu voz interior (instintos, juicios) si te están diciendo que algo no parece correcto”.

Establece tu propio conjunto de reglas familiares.

“No dejes que los demás sepan si estás en casa solo”.
“Puedes decir ‘no’ a cualquiera que quiera que rompas una de las reglas de la familia. Yo te respaldo”.
“Puedes subir al coche con ____ o ____, pero no con nadie más sin preguntar primero”.

Juega “qué pasa si” para practicar la toma de decisiones.

“¿Qué pasaría si estuvieras jugando (en algún lugar al que no se supone que juegues) y un hombre o una mujer trataran de hacerte entrar en su auto?”
“¿Y si nos separáramos en el centro comercial?”
“¿Y si alguien que conocemos muy bien te haya tocado de una manera confusa y te pidió que lo mantuvieras en secreto?”
“¿Qué pasaría si una persona mayor te ofreciera dinero (o algo que realmente querías) si rompías nuestras reglas familiares?”

Ayuda a los niños a desarrollar habilidades de asertividad. Enséñales a responder verbalmente.

“Déjame solo. Yo diré.”
“No.”

Practicar la respuesta de manera no verbal: quitarle la mano a alguien, huir, alejarse, ponerse de pie, echar los hombros hacia atrás, mirar a la persona a los ojos, sacudir la cabeza. Todo eso ayuda a evitar el acoso sexual.

Enseña a los niños que los adultos no siempre tienen razón.

“La mayoría de los adultos tocan a los niños de maneras apropiadas, pero algunos no lo harán”.
“Si no estás seguro acerca de algo que un adulto dice o hace, pídeme que te ayude a explicarlo”.

Enseña a los niños que hay ciertas cosas que los adultos, niños mayores o niñeras no deberían hacer. “Nadie tiene el derecho de bajar la mano por los pantalones, forzarte a tocarlos, tocar tu cuerpo si dices ‘no’ o tocas tus partes íntimas”.

Ayuda a los niños a desarrollar un vocabulario digno para las partes del cuerpo.

Los niños sin palabras, podrían sentirse avergonzados de pedir ayuda con un problema de acoso sexual. Los términos correctos para las partes del cuerpo (pecho, pene, vagina) son dignos y permiten a los niños expresarse claramente.

Un buen sustituto de la terminología médica es “partes privadas”.

Finalmente, enseña a los niños que las normas de seguridad se aplican todo el tiempo, no sólo con extraños, hombres o niñeras. Mientras que las reglas sobre los extraños son importantes en la instrucción de seguridad, es raro que un niño viva acoso sexual de un extraño. La mayoría de los niños, lo experimentan por alguien que conocen y confían.