El masaje infantil es una antigua tradición que ha pasado de generación en generación a través de los años, siendo uno de los más fáciles y agradables métodos para establecer el primer contacto con tu bebé; Se ha considerado que el contacto afectivo es una parte importante durante los primeros años de vida para un adecuado desarrollo del niño.

Los beneficios del masaje para bebés van más allá de un simple masaje de relajación, si bien es cierto, ayuda a los niños a estar más tranquilos, también favorece los aspectos psicológicos, emocionales y físicos, contribuyendo específicamente en los sistemas digestivo, cardiovascular, nervioso, respiratorio, pero sobre todo en el sistema inmune.

Todos los bebés pueden recibir masaje, ésta actividad ayuda a desarrollar más rápidamente la coordinación motora y aumentar su tono muscular, además de favorecer que el bebé sea más receptivo y reaccione mejor al espacio que lo rodea. Consiste en pequeñas caricias o fricciones suaves que se le dan de forma armónica sobre cabeza, cara, pecho, abdomen, piernas, brazos, manos y espalda. Se complementa con movilizaciones suaves de brazos y piernas.

Para que el masaje sea efectivo, la persona que lo proporciona deberá estar en una posición cómoda y hacer una pequeña relajación antes de comenzar, para no transmitir al bebé ninguna sensación negativa.

Algunos de los beneficios del masaje para tu bebé son:

  • Regula las funciones respiratorias, circulatorias y gastrointestinales. A través de la estimulación constante se pueden controlar las incomodidades producidas por los cólicos, gases y estreñimiento, así como las molestias por la salida de los dientes.
  • Ayuda a tu bebé a relajarse y liberarlo de la tensión acumulada debido a los estímulos de su entorno.
  • Ayuda a intensificar la comunicación afectiva entre el bebé y las personas de su entorno, facilitando la comunicación no verbal.
  • Estimula el sistema inmunológico y propicia un mejor desarrollo del sistema nervioso.
  • Aumenta la autoestima y seguridad en tu bebé.
  • Ayuda a que el bebé tenga un sueño más tranquilo y profundo.
  • Aumenta el contacto afectivo del bebé con sus padres a través de sentirlo piel con piel, mirarlo, la sonrisa, los sonidos, los abrazos, las caricias, el olor y los estímulos.

Ésta actividad además de traer grandes benéficos para tu pequeño te ayudará a estar más conectado con él, además de que es una muy linda actividad que pueden realizar justo antes de dormir brindándoles a ambos un estado de tranquilidad. Puedes apoyarte con aceite vegetal, aceite de almendras dulces, pepita de uva, caléndula o crema libre de químicos para evitar alergias en su piel. La primera vez que vayas a utilizar alguno de estos productos en tu bebé aplica solo un poco sobre su piel y espera unos minutos para comprobar que no le cause ninguna irritación o alergia.