Septiembre nos dejó una tristeza enorme y a la vez una enseñanza maravillosa, “Somos uno” México despertó de la apatía, la frialdad, la incomprensión , el abandono , el desamor, y muchas posturas más, dejando que la rutina se instalara en sus habitantes, y todo esto en unos segundos, a  raíz de un hecho tan lamentable como lo fue el sismo que dejo sin casa y sin vida a muchas personas, todos nos conmovimos con las escenas de derrumbes, de personas sin hogar , niños sepultados, padres angustiados y miles de escenas desgarradoras.

Hoy México sigue de pie, sin duda el sentimiento más sublime es el amor y este surgió del corazón de todos los Mexicanos que se volcaron en esfuerzos por levantar su país , no escatimando nada, cada uno a sus posibilidades, demostramos de que estamos hechos los Mexicanos que sin duda alguna somos el orgullo de nuestra nación.

Pero todo pasa, y más pronto para los que no fuimos afectados con alguna pérdida, per o el amor expresado debe seguir expandiéndose en nuestro círculo más cercano, padres, esposo, hijos, hermanos, familiares y comunidad, porque este despertar maravilloso fue una dura sacudida pero también un alto a patrones destructivos que poco a poco estaban acabando con nuestra sociedad.

Los padres tenemos un gran compromiso, hacer que el sentimiento de solidaridad crezca pero se requiere de un ejemplo que lo impulse, la tierra ya nos mostró como, no esperemos vivir un movimiento brusco en nuestras vidas para decir, “Soy capaz de amar, de perdonar, de ayudar a mi prójimo”, se requiere un gran nivel de conciencia para continuar este camino que las circunstancia nos mostró y de la cual surgió el verdadero Ser de cada uno.

Hoy podemos decir que detrás de la tormenta sale el sol, esa tormenta que nos llevó a todos a ser mejores personas, como decía mi abuela, “Para atrás ni para agarrar vuelo” tomemos nota de todo lo bueno que nos dejó esta situación y hagamos un esquema de repetición de actos, estos nos llevara a construir hábitos que al desarrollarlos se convertirán en virtud.

Te pregunto qué fue lo que más a te movió? Recordemos que todo cambia en la vida, nada permanece en su lugar ni la tierra misma que se supone es fuerte, sólida y firme, por lo tanto todo tiene que cambiar, si te movió el abandono de los niños, revisa en tu interior el abandono que has sufrido y sánalo, si te movió los padres que perdieron a sus hijos, abraza a los tuyos y acompáñalos conscientemente en su camino por este mundo, si te movió la impotencia de no poder ayudar, en tu comunidad también necesitan de ti, Si te conmovió la ayuda de nuestros hermanos peludos que arriesgaron su vida con ese amor incondicional que los caracteriza, es momento de darle amor a uno que hará lo mismo por ti cuando lo necesites.

Hay tanta enseñanza en el caos que en vez de asustarnos debemos preguntarnos para que esta esto en mi vida, que enseñanza oculta me está dando, que debo superar, que no he visto que me hace repetir una y mil veces los mismos patrones, créanme en todo hay enseñanza , depende de nosotros descubrirla, aprender de ella y superarla.

Que nuestro país se restablezca pronto de esta lamentable tragedia , que el espíritu de los mexicanos no decaiga y que nuestro corazón se siga expandiendo en amor como hasta hoy , porque para eso venimos a este mundo , para amar , aprender y superarnos.