En la revista académica Frontiers in Nutrition, un quinteto de investigadores de Roma, Italia, han demostrado un claro vínculo entre el consumo de un compuesto natural que se encuentra en el cacao y el chocolate y una mejor función cerebral.

Los investigadores dicen que comer chocolate puede tener un efecto real sobre el poder del cerebro, especialmente para las personas que están privadas de sueño, que se enfrentan a otros desafíos cognitivos o para los niños.

El equipo recorrió 10 estudios previos para determinar qué sucede con los cerebros de las personas en las horas después de consumir compuestos llamados flavanoles, que se encuentran comúnmente en el cacao y el chocolate.

En nueve de los diez estudios, que incluyeron un total de 467 sujetos, según la sinopsis de los investigadores italianos, los participantes que ingirieron dosis controladas de cacao o chocolates, tuvieron al menos algún aumento en las pruebas cognitivas, como la atención, la velocidad de procesamiento y la memoria de trabajo. Por otra parte, la administración de flavanoles de cacao también podría mejorar el funcionamiento cognitivo normal y ejercer un papel protector en el rendimiento cognitivo y la función cardiovascular específicamente afectada por la pérdida de sueño, en sujetos sanos.

Para las mujeres, especialmente, la ingestión de cacao después de una noche de “privación total del sueño” fue realmente capaz de “contrarrestar el deterioro cognitivo (es decir, menos precisión en el desempeño de las tareas) que esa noche trae consigo”. Este hallazgo podría ayudar a las personas que soportan la privación crónica del sueño como resultado de los turnos nocturnos de trabajo (por no hablar de madres privadas de sueño en todas partes). También el avance se veía en adultos mayores que perdían la memoria y en niños a los que les costaba trabajo concentrarse en cosas como hacer la tarea o estudiar para algún examen.

Los investigadores tuvieron cuidado de señalar que hay un inconveniente obvio para el consumo de chocolate: las altas calorías, el alto contenido de azúcar y el bajo valor nutritivo del chocolate (a pesar de la investigación actual).

Sin embargo, también señalan que el consumo de “cacao y productos derivados de éste han demostrado claramente ejercer beneficios cardiovascularesc. Pero necesitamos más investigación (que incluiría) diseños experimentales complejos… y comparar directamente los efectos cognitivos inmediatos con los duraderos”.