Es común escuchar o de pronto como mamás pensar, que los abuelos disfrutan más la etapa cuidar, jugar y darle de comer a sus nietos, que cuando nos criaron de chiquitas.

La respuesta es que sí… y no. Para los abuelos los nietos es como una segunda paternidad. Es la continuación de su sangre, saber que su herencia no se perdió y de alguna forma al morir, una parte de ellos seguirá en el mundo. Esto de acuerdo a estudios de la Universidad de Boston.

Pero no sólo eso. El convivir con los nietos y que los hagas parte de su vida diaria, les da ánimos para vivir una vejez más plena y previene que caigan en una depresión por sentirse alejados de la familia o abandonados. Además aunque de pronto sientas que tal vez a ti no te consintieron tanto o te educaron con más disciplina, para ellos es una forma de seguir en tu vida.

Los beneficios de los abuelos no paran ahí. Los nietos también son más felices y tendrán un desarrollo mejor con sus abuelos acompañándolos. No sólo porque casi todo el tiempo se dedican a consentirlos y jugar con ellos, sino porque su experiencia y enseñanzas les darán una visión más amplia de la vida desde temprana edad.

También tú obtienes cosas buenas al tener a tus papás junto a tus hijos. Ya sea un apoyo extra, un hombro en donde llorar, palabras que te den ánimo y sobre todo, todo el aprendizaje que te servirá para cometer la menor cantidad de errores como mamá.

Así que ya lo sabes, si tus padres continúan a tu lado en el viaje de la maternidad, permíteles estar contigo y tus hijos. Quizá a veces tendrán desacuerdos, pero lograrán una relación llena de amor donde al final toda la familia saldrá beneficiada.